Por: Dr. Julio Vargas
Los resultados de la reunión del
Comité Político son catastróficas: conllevan con seguridad meridiana
aumentar la pobreza material y espiritual de las grandes mayorías del
pueblo dominicano.
De una vez y por todo ese órgano del Comité Central del PLD
decretó que la obra política de Juan Bosch, la basada en Servir al
Partido para servir al Pueblo, definitivamente dejó de ser un proyecto
de Nación y pasó hacer una empresa del liderazgo coyuntural de sus
principales dirigentes.
Y estemos claro, no por el hecho de que sea viable o factible o
no la reelección del presidente Danilo Medina, o que sea Leonel
Fernández el candidato, sino por el hecho de que esa disyuntiva debió
consensuarse entre Danilo y Leonel y someterse al Comité Político para
su aprobación. De esta manera lo planteamos en artículo publicado el día
8 de marzo del corriente año.
Al llevarse a votación, esa importante decisión, entre los 35
miembros que componen ese órgano del Comité Central del PLD: el PLD
aceleró el, proceso de división de esta importante herramienta política
que con tanto sacrificio trató de construir el líder moral del pueblo
dominicano en base a la estructura organizativa, basada en la
organización y disciplina, el método de trabajo y la unificación de
criterios, orientada con el interés de crear las condiciones materiales
de existencia capaz de soportar un régimen de justicia social para los
dominicanos.
Al alejarse de esa estructura
organizativa, de disciplina y metodología política partidaria, el PLD
entra en la vorágine de las deformaciones estructurales, sociales y
políticas de las distorsiones históricas de la sociedad dominicana, y de
ahí no hay retorno, solo división, y lo peor: Los platos rotos lo
pagará el pueblo; y que desgraciado ejemplo, este viaje sin retorno se
produce en la víspera del cincuenta aniversario de la Revolución de
abril.
Danilo y Leonel deben retomar el consenso y el interés político
y social de las grandes mayorías el pueblo dominicano, no jueguen a la
división, el PLD es un bien político y social puesto en sus manos por
Juan Bosch para servir al pueblo dominicano, pónganse a su altura
histórica!
Aún hay tiempo para guiar la nave a puerto seguro, ¡Recapaciten!
Ver artículo del 8 de marzo 2015