Por Hidalgo Rocha Reyes
A raíz de la modificación o reforma a nuestra constitución dominicana
proclamada en Enero 26 del año 2010, las mayorías de nuestras leyes
sustantivas han quedado semi- huérfanas puesto que no han sido adecuadas
a la realidad de esta por los actores que debían de hacerlo, dejando
bache jurídico que realmente enloquecen.
Esta
falta de adecuación o actualización de las leyes y códigos que rigen
los diversos estados de derechos de los dominicanos con nuestra
constitución ha estado ocasionando obstáculos y violaciones en la
implementación o actualización con las reglas que deberíamos de cumplir a
la hora solicitar reparo por violaciones de derecho.
Eso
por eso la ley electoral 275-97 que rige nuestro sistema electoral no
escapa a ello. Todavía nuestra Junta Central Electoral, organismo
encargado de velar por un democrático e imparcial proceso electoral,
además de administrar el registro civil y el estado civil de todos los
ciudadanos dominicanos, se rige por una ley inadecuada y desactualizada
frente a nuestra constitución, donde, no obstante habérsele quitado a
esta la facultad contenciosa, al crearse el tribunal superior electoral,
aun se sigue ordenando mediante la referida ley, prácticamente
incursionando en violaciones en sus ejecuciones frente a nuestra
constitución.
Los
jueces que componen este organismo estatal electoral, creo que así lo
saben. Pero lo que más llama la atención es que para sus ejecuciones,
aun frente a tales violaciones, estas no están sustentadas en adendum a
la referida ley, aun sabiendo desde el frente de nuestra cobija, que
tales acciones han sido para la mejoría de ese organismo.
Frente
a preparación del próximo certamen electoral, el pleno de la junta ha
tenido que continuar con tales violaciones para poder adecuar los
procesos electorales a los nuevos tiempos y organizar un proceso que sea
diáfano, creíble y ordenado como lo realizados anteriormente donde los
resultados obtenidos le han valido como carta de presentación para que
organismo internacionales avalen su desempeño y credibilidad.
Esa
actualización choca ahora con el sistema de conteo, que si bien es
cierto que los artículos 126 y siguiente de la ley electoral 275-97,
estipulan la forma de conteo de los colegios electorales, no menos
ciertos es que para tales fines la Junta llamo a todos los
representantes de los partidos acreditados como delegados ante la misma,
después de que el pleno dictaminara, mediante resolución, la forma como
se automatizaría el conteo de los votos, hoy vemos como partidos que
dieron el visto bueno, se opongan a la digitación de los mismos.
Pero
más pena da ver en los medios como un juez de la propia junta sale a
esta altura de juego, faltando días para celebrar las elecciones, dando
declaraciones de violaciones a la ley electoral donde el mismo, como
miembro del pleno, aprobó o firmo la manera de cómo se realizarían estas
elecciones.
El
Juez Eddy Olivares, después de que los preparativos están casi
finalizando para el escrutinio nacional y sobre todo después de a verse
adoptado todo un procedimiento internacional de licitación, para la
obtención de los equipos que se utilizarían, aparece ahora, en franca
sintonía con partidos que buscan encontrar alguna razón para
desacreditar el proceso, emitiendo consideraciones, que mas que daño a
la junta, le hacen daño a su trayectoria.
Creo
que más que declaraciones Olivares lo que debe es hacer un Mea Culpa o
darse tres golpe en el pecho frente a la opinión publica, porque salir
ahora con tales declaraciones, después de conocerse en el pleno, de cómo
se realizarían las elecciones y de donde El es miembro titular, no son
más que muestra de que esta en la junta buscando echarle agua al
salcocho.