La mejor forma de demostrar la verdad es presentando las evidencias
para que la opinión pública sea el jurado por excelencia. Este centro
educativo a partir de nuestra llegada en el año escolar 2010-2011
experimentó un significativo cambio en el orden institucional y
pedagógico. El nivel de violencia que encontramos allí era tan grande
que hasta los docentes eran irrespetados, la desesperación de padres y
tutores era evidente por el nivel de inseguridad que allí se vivía.
De aquel lugar llamado escuela solo existía algo de mucho valor y era
la experiencia de los docentes y el personal administrativo quienes
albergaban la voluntad de cambio sin demora, pero necesitaban de un
equipo de gestión que les aportara coraje, creatividad e inteligencia.
El nivel de violencia era tan grande que la escuela tenía sus propios
apodos, “Virgilio pelea” o “la escuela del mal”, estos eran alusivos a
la cantidad de pleitos y golpes que ocurrían allí. Para las autoridades
educativas era un verdadero dolor de cabeza esta escuela por las
múltiples situaciones que allí se presentaban.
En
cuanto a los datos propiamente escolares tales como deserción,
repitencia y sobreedad era casi de un 50% según datos que manejamos
cuando realizamos el FODA en el 2010 junto a la comunidad educativa. El
otro elemento peor lo constituía la planta física y la ubicación
geográfica el cual era inaceptable para impartir docencia. Con nuestra
llegada el 2010 y la formación de un gran equipo de gestión, acompañado
de la comunidad de Villa Estela logramos cambiar esa imagen de
inseguridad y poco trabajo que presentaba la escuela ante la sociedad.
Ya a partir del año escolar 2011-2012 la reputación de la escuela Virgilio Peláez comienza a subir y los padres comienzan a creer más en la calidad de la enseñanza, a partir de esta fecha comienza un ascenso hacia la excelencia de este centro educativo.
Para el año escolar 2012-2013 fuimos seleccionado para participar en el primer grupo de la llamada ESCUELA DE DIRECTORES del Ministerio de Educación, es allí donde se consolida la transformación del centro educativo, ya aquí la escuela se proyecta por medio de su Proyecto Educativo (PEC) 2012-2016 y la implementación de constantes de planes de mejoras para responder a necesidades educativas especiales.
En
esta etapa el centro educativo Virgilio Peláez inicia a gozar de una
credibilidad institucional y pedagógica que era reconocida como el gran
salto de una escuela que de estar en el anonimato positivo se perfilaba
como uno de los mejores centros educativos públicos de Barahona. Esto
provocó una demanda a gran escala de inscripciones, que hasta la fecha
sigue igual esa demanda, por los padres tener sus hijos aquí.