lunes, 12 de junio de 2017

DE BUENA TINTA EN DL! Se olvidaron que el Diablo cobra... Y también que no fue aquí el alboroto...

Tomado de Diario Libre
El que vende el alma al diablo sabe que más tarde o más temprano este vendrá a buscarla. Nadie más interesado que el demonio, pues no debe olvidarse que vive en competencia. Incluso pone en apuros al cielo que vive con sus noventa y nueve justos esperando el pecador que deberá arrepentirse. Una alegría siempre postergada o en expectativa.


Odebrecht es el diablo y compró almas aquí y llegado el momento vino a buscarlas, porque Odebrecht no es un demonio dominicano. Es brasileño. Ese es el punto que no se entiende. Que hubo gente que vendió su alma y vivió abundante de bienes pensando que el diablo nunca iba a atreverse a cobrar la pieza. Pues vea que sí.

Si el infierno no se alborota en Brasil, Fausto (que era y es PRD, PRM, PLD y particular) hubiera seguido viviendo como los reyes de la antigüedad. Rico y despreocupado.

Con dinero a manos llenas y alma plena, y con tanta suerte que no consideró el dicho al revés. No solo no hay mal que dure cien años, sino que tampoco bien. Cuando el diablo viene de levita y dice entregue, no queda de otra que cumplir. Aunque duela y atormente en Najayo o en la Victoria.