miércoles, 15 de diciembre de 2021

CRÓNICA DE RAFAEL M. FÉLIZ! Nuestras Glorias: Edita Franco

Nuestras Glorias: Edita Franco

Por Rafael Matos Féliz/Tomado de Facebook
Ada Franco Castillo (Edita), gloria del deporte de Barahona, nació en esta ciudad en el otoño del 1951, el 28 de noviembre. Sus padres fueron los señores, Ángel Franco y Bienvenida Castillo. Al fallecer su madre, siendo ella una niña, ocupa ese importante lugar, con profundo amor y protección, la señora Manuela Reyes Féliz (Reyita).

Edita desarrolló su niñez, adolescencia y adultez, cerca del Parque de Los Sueros en Barahona, y allí se introduce en los juegos infantiles del sector. Mientras cursaba la Primaria, practica el volibol en la Escuela Leonor Feltz; llegando a tener entrenadores de la talla de Bienvenido Peláez y Ruddy Wöel. Luego pasa al Liceo Secundario Federico Henríquez y Carvajal, localizado frente al Arco del Triunfo. Hoy, allí se encuentra la Escuela Leonor Feltz. En el Liceo sigue practicando volibol y además se introduce en el Softball y en el atletismo, específicamente en la carrera de velocidad. Sus entrenadores, en estas últimas disciplinas, eran Américo Patnella y Alcides Peña.

Jugando voleibol en contra de los equipos del Colegio Morgan y del Divina Pastora, Edita que era del equipo del Liceo Secundario, se convierte en la “Mejor Defensora de todos los torneos”. No había remate contrario que no fuera parado y devuelto por esta estelar jugadora. Esto ocurrió en los años del 1964 hasta el 1967. Luego, del 1967 al 1968, pasa a jugar Softball con el equipo femenino representativo de Barahona, enfrentándose a las novenas de Azua, Baní, San Juan, Bonao y otras provincias. En casi la totalidad de esas competencias, las barahoneras salieron vencedoras. La lanzadora estrella lo era Nora González y Edita jugaba la Primera Base, teniendo como entrenadores a los extraordinarios deportistas, Cacata Cabrera y Hugo Peláez.

Una de las novenas que cayó abatida frente a las suroestanas, lo fue la representativa de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), en una competencia para definir el primer lugar de los Juegos Estudiantiles. Mientras Edita participó con las novenas de softbol, tanto con la del Parque de Los Sueros (en su niñez y pubertad), luego con el equipo del Liceo Federico Henríquez y Carvajal como con la selección de softbol femenino de Barahona, demostró su calidad por todos los confines. Sus metrallazos, desde la caja de bateo, eran extraordinarios. De seguro daba un hit, un doble o un triple y de vez en cuando un cuadrangular. Esas destrezas, la hicieron ver como seria amenaza para las contrarias.

Posteriormente, y en el mismo 1968, Edita vuelve al atletismo y practica en carreras de 100 metros planos. Luego, la Federación Dominicana de Atletismo, la selecciona para entrenarse con miras a los Primeros Juegos Nacionales Estudiantiles. Dicho entrenamiento lo realizó junto a otros jugadores barahoneros, como fueron Álvaro Enriquillo Lembert y Gil Fortuna (Cuqui).

En el mismo 1968, participa en Santo Domingo en los Primeros Juegos Nacionales Estudiantiles y allí Edita gana “Medalla de Oro (Primer Lugar)”, en los 100 metros planos; convirtiéndose así en la “Primera Campeona Nacional” de esa prueba de velocidad en la República Dominicana. Mientras se mantenía participando con la selección provincial de atletismo, compite contra equipos de las provincias del sur, tales como Azua, San Juan y Baní y logra el Primer Lugar Regional, en la carrera de los 100 metros planos.

Para el 1970, Edita es seleccionada nuevamente para entrenarse en atletismo, en esta ocasión con miras a volver a participar en los Segundos Juegos Nacionales Estudiantiles, en la carrera de los 100 metros planos. Pero ocurrió algo con lo que ella no contaba y fue que su familia se opuso a su participación, pues entendían que tantas salidas fuera de la casa, de una joven de apenas 19 años de edad, era demasiado. De ese modo, se apagó una estrella del atletismo regional y nacional. En esos Segundos Juegos Estudiantiles, sus antiguos compañeros de entrenamiento, Álvaro Lembert y Cuqui Fortuna, lograron Medallas de Oro, en carreras de relevo 4x100 y 200 metros planos, respectivamente.

En el 1971, se separó de los deportes, del atletismo, del Softball y de la escuela, llegando al 2do. Teórico del Bachillerato. Retirada y probablemente con mucha nostalgia y frustración en sus sueños de estelar deportista, unos 10 años después (1981) se dedica a la labor de Estilista de Belleza. Con este oficio capacita a sus hijas y ellas forman, el hoy Salón Tiziana. En relación marital con Miguel Pérez procreó a sus adoradas hijas Yessica y Estíbasis. Luego, con Feliciano Cortez (Negro) procreó a Ricardo y más tarde con su pareja Leonel Ramírez procreó a su querida Leonela. Edita vive en la calle Candelario De La Rosa, en Barahona y está dedicada a adorar a Dios.

¡¡EDITA FRANCO, ESTELAR DEPORTISTA Y MUJER DE BUEN VIVIR. PARA TI, HONOR Y GLORIA!!