Tomado de BBC Mundo
Una de las frases que resonaron más tras la masacre
del colegio de Sandy Hook, en Connecticut, donde Adam Lanza mató a tiros
a 20 niños y seis maestros, fue: "Un maestro armado pudo haberlo
detenido".
Ahora, los docentes del estado de Dakota del
Sur, en el centro de Estados Unidos, podrán ser capaces de actuar como
"centinelas" en sus propias escuelas, debido a una polémica ley que
entra en vigencia este 1º de julio.
La legislación, patrocinada por los
republicanos y firmada en marzo, permite armar a los maestros y otros
miembros del personal de los centros educativos estatales.
Y es que tras la serie de masacres ocurridas
recientemente en escuelas de Estados Unidos, la opinión pública del país
está cada vez más dividida sobre si la solución a estos hechos de
violencia es armar más a la población.
La medida en Dakota del Sur no forzará a los
colegios de los distritos a armar a todos sus maestros y tampoco
requerirá que estos lleven armas a su trabajo.
Pero sí permite que cada distrito escolar elija si su personal debe armarse.
Centinelas escolares
La nueva norma incluye entrenamiento para los maestros que deseen ir armados a la escuela.
Si la respuesta es afirmativa, el personal
armado que porte armas de fuego a las instalaciones escolares y campus
será conocido como "centinela escolar" y será sometido a un programa de
entrenamiento especial creado por una comisión estatal de agentes del
orden público.
Hasta ahora, sin embargo, funcionarios locales
indicaron que "no se sabe" de ninguna escuela del estado que apoye la
ley o que haya tomado las medidas necesarias para designar a centinelas
dentro de sus instalaciones.
Tal como informa la agencia de noticias AP,
Scott Craig, representante republicano y uno de los dos impulsores de la
legislación en Dakota del Sur, dijo que algunos distritos del estado
"están considerando la idea".
Pero agregó que "se tardarán algún tiempo en decidir" si deben adherirse al programa o no.
"La gente quiere esperar para ver cómo resultará esto en el primer año", afirmó Craig.
Y el fiscal general del Estado, Marty Jackley,
cuya oficina está a cargo de redactar las leyes de entrenamiento para
los centinelas escolares, indicó que "algunos miembros" de juntas de
gobierno de escuelas le han preguntado sobre el programa pero ningún
distrito le ha notificado que esté a favor de adherirse.
Polémica
"Se trata de la seguridad. Ésa es la premisa: la apariencia de la seguridad, de que protegemos lo que es más valioso, nuestros niños"
Scott Craig, representante republicano
Desde un principio la legislación estuvo rodeada de polémica.
Scott Craig y sus simpatizantes argumentan que
sólo el hecho de tener personal armado en una escuela servirá como
disuasivo de ataques en centros educativos.
Defendió la norma diciendo que, aunque en las
escuelas de las grandes ciudades hay oficiales de policía patrullando
las instalaciones, algunos institutos rurales no tienen los fondos para
contratar a estos agentes de tiempo completo.
"Algunas escuelas rurales podrán ahora armar a
voluntarios porque están ubicadas hasta a 45 minutos de distancia de la
estación de policía más cercana", indicó.
"Se trata de la seguridad. Esa es la premisa: la
apariencia de la seguridad, de que protegemos lo que es más valioso,
nuestros niños", aseguró Craig.
"Esta ley de los llamados centinelas no contempla la seguridad de los edificios escolares, la salud mental o la respuesta de los servicios de emergencia "
Rob Monson,Administradores Escolares de Dakota del Sur
Pero quienes se oponen, incluidos miembros de
las juntas de gobierno escolares, administradores y maestros, afirman
que el programa puede conducir a tiroteos accidentales al poner armas en
manos de individuos que no están suficientemente entrenados para
disparar en situaciones de emergencia.
Para ellos, tener armas de fuego en las escuelas puede volver a las instituciones más peligrosas.
"Seguimos pensando que nuestras escuelas son
lugares extremadamente seguras", dijo Rob Monson, director ejecutivo de
Administradores Escolares de Dakota del Sur (School Administrators of South Dakota - SASD), una organización que reúne a las asociaciones de padres y juntas de gobierno de las escuelas del estado.
Seguridad
SADS se opone a la nueva legislación para armar a
los maestros y subraya que la medida no soluciona los asuntos
esenciales del problema.
Según Monson, "esta ley de los llamados
centinelas no contempla la seguridad de los edificios escolares, la
salud mental o la respuesta de los servicios de emergencia".
El control de armas se ha convertido en un asunto definitorio para Barack Obama.
Añadió que el asunto de la seguridad escolar no
se soluciona "armando a la gente en nuestras escuelas" y que su
organización llevará a cabo un estudio más amplio sobre cómo abordar
este aspecto, incluida la mejora de las entradas a las escuelas.
Lo cierto es que ningún tema ha dividido tanto a
los estadounidenses como el del control de armas. Este ha sido uno de
los temas clave en el segundo periodo presidencial de Barack Obama.
Tras la masacre de Sandy Hook, muchos estados
del país han estado revisando sus leyes sobre armas y analizando si
éstas deben reforzarse o no.
Hasta abril, parecía que iba ganando el apoyo de aquellos que desean más armas para más personas.
Según el Law Center to Prevent Gun Violence
(Centro de Pautas para Prevenir la Violencia por Armas), un organismo
sin fines de lucro con sede en California, hasta hace dos meses cinco
estados del país habían aprobado siete normas a favor de un mayor
control para el acceso a las armas de fuego, pero diez estados habían
sancionado 17 leyes para suavizar el control de armas.
Sin embargo, a juzgar por la nueva ley de Dakota
del Sur, muchos estadounidenses parecen decididos a defender su derecho
constitucional a poseer un arma, pero no todos están realmente
dispuestos a portarlas.