Por Alejandro Santana/Tomado de El Biran NY
Es posible que ninguna de las modalidades del robo sobre la tierra sea nueva, pero igual sigue impactando y surtiendo sus efectos aunque hayan transcurrido muchos años desde la primera vez que alguna modalidad se manifestó.
Recientemente, desde el Palacio Nacional, alguien que se identificó como el doctor Tavares, realizó una llamada telefónica a una persona de Barahona, preguntando a quien contestó ¿cuáles son las necesidades de ese hogar?.
Soy el doctor Tavares, trabajo en el Plan Social de la Presidencia, desde esta parte social tenemos dispuestos varios millones de pesos para ir en auxilio de personas que como usted, necesita de la solidaridad del Estado.
¡Su casa, tiene plato!, necesita hacerla mas segura ahora en esta temporada ciclónica!, sólo tiene que darme los datos, hacer el presupuesto y estará dentro de la lista de clasificados para recibir los beneficio de este departamento.
La persona que recibió la llamada, le pareció raro y le contestó que por el momento no tenía identificado ningún problema, pues recomiéndeme otra persona que usted entienda que en la actualidad esté necesitada, para ayudarla.
Conozco a un señor de un ministerio cristiano que necesita, le doy su teléfono y usted se pone en contacto con el; así pasó.
El señor Tavares, se puso en contacto con esa persona, se pusieron de acuerdo, le visitarían para conocer mas de cerca su caso; otra llamada de Tavares,”su caso ha sido aprobado debido a que el presupuesto que usted nos envío esta ajustado a lo real”.
Para ser ejecutado, sólo falta que nos envié siete mil pesos para los gastos burocráticos de esta entidad, el dinero debe enviarlo por Caribe Express, al señor Ramón A Gil.
Han transcurrido unos tres meses y el teléfono del doctor Tavares, el 829-336-2306, suena, suena y nadie contesta. El doctor Tavares, se ha esfumado por lo menos para esa persona timada.
Estos son los casos que salen a la luz publica, pero como este hay muchos que por vergüenza o temor no salen a la palestra publica, y aunque uno crea que se la sabe toda, siempre estará al asecho una de las mil caras del engaño para afectarnos,!nunca crea en las promesas de color rosa!