Alemania golea 7-1 a Brasil
¡Silencian la samba!
FUE LA PEOR PALIZA DE SU HISTORIA, PEOR QUE EL 6-0 DE 1920 ANTE URUGUAY EN LA COPA AMÉRICA
Pablo Elias Giussani | AP
BELO HORIZONTE, Brasil/Tomado de Listin Diario
Los goles se sucedieron con una velocidad extraordinaria. Thomas Mueller, Miroslav Klose, Toni Kroos, dos veces, Sami Khedira.
Por segunda vez, Brasil no pudo
ganar un Mundial en casa. El “Mineirazo” de Alemania no se produjo en la
final, como el “Maracanazo” de 1950 ante Uruguay. Pero en muchos
sentidos fue un revés más catastrófico todavía.
Fueron cinco en la peor media
hora en la historia del fútbol brasileño y le dieron a Alemania una
resonante victoria 7-1 ayer martes sobre el anfitrión en el estadio
Mineirao y el pase a la final de la Copa Mundial de fútbol.
Para empezar, fue la peor paliza
de su historia, peor que el 6-0 de 1920 ante Uruguay en la Copa
América. Ni hablar de los mundiales, donde el revés más abultado era el
3-0 que Francia le endosó en la final de 1998. Brasil nunca había
permitido cinco goles en un solo tiempo en una Copa Mundial.
“Queríamos darle una alegría al
pueblo”, dijo un desconsolado David Luiz a pie de cancha.
“Desafortunadamente no lo conseguimos. Ofrecemos disculpas a todo el
mundo, disculpas a todos los brasileños”.
“Sinceramente es difícil de
explicar”, abundó el arquero Julio César. “Es muy complicado explicar lo
inexplicable. Tenemos que reconocer el gran fútbol alemán”.
Ausente por lesión Neymar, que
había sido su principal referente de ataque, el técnico Luiz Felipe
Scolari hizo jugar al delantero Bernard, sacrificando un poco de marca.
La apuesta le salió mal, ya que Brasil no inquietó a los alemanes y fue
presa fácil de sus ataques.
Pasados unos minutos de presión
brasileña, Alemania comenzó a adueñarse del mediocampo con grandes
actuaciones de Kroos, Bastian Schweinsteiger y, sobre todo, Khedira, un
jugador de marca que se sumó criteriosamente al ataque.
Alemania abrió el marcador
apenas cumplidos los 11 minutos, cuando la defensa brasileña perdió las
marcas en un tiro de esquina y Mueller anotó su quinto gol del torneo, y
décimo en dos mundiales, sin que nadie lo incomodase.
El gol madrugador tuvo un efecto
devastador para Brasil, que quedó aturdido. El equipo, que ya había
mostrado cierta flaqueza emocional en otros encuentros, perdió toda
cohesión, sus jugadores comenzaron a regalar balones y se sucedieron los
ataques ante una defensa que era un colador.
Las ventajas que dio el equipo
verdeamarelo fueron tantas que los alemanes se hicieron un festín
adentro del área, sin apurar los remates y pasándose el balón entre
ellos hasta encontrar el hueco. Parecía un partido de barrio.
Klose aumentó tras una
combinación con Mueller a los 23, para llegar a 16 tantos en cuatro
mundiales y convertirse en el máximo artillero en la historia del
torneo, con uno más que el brasileño Ronaldo. Kroos anotó dos en un par
de minutos, a los 25 y 26, uno de ellos en una jugada que inició él
mismo robándole un balón a Fernandinho, y Khedira marcó el quinto a los
29, tras otra combinación de varios jugadores adentro del área.
En un segundo tiempo de trámite,
Ande Schuerrle anotó otros dos, a los 69 y 79, y Julio César evitó un
par de caídas. El gol del consuelo llegó casi sobre el silbato final,
obra de Oscar en un contragolpe.
Alineaciones:
BRASIL: Julio César, Maicon, Dante, David Luiz, Marcelo,
Fernandinho (Paulinho, 46), Luis Gustavo, Oscar, Hulk (Ramires, 46),
Bernard y Fred (William, 69).
ALEMANIA: Manuel Neuer, Benedikt
Hoewedes, Mats Hummels (Per Mertesaker, 46), Jerome Boetang, Philipp
Lahm, Sami Khedira (Julian Draxler, 76), Bastian Schweinsteiger, Toni
Kross, Mesut Oezil, Miroslav Klose (Andre Schurrle, 58) y Thomas
Mueller. Arbitro: Marco Rodríguez (México).