El jurado ha destacado en su argumentación sus logros para “el avance de la paz y la reconciliación” en Europa, así como el establecimiento de “la democracia y los derechos humanos” en el viejo continente. Su “mayor éxito”, según el jurado, es haber logrado que “la paz, la democracia y los derechos humanos” hayan arraigado en Europa, y que la “guerra continental”, en referencia a la II Guerra Mundial, acabase en “la paz continental”.
“El atroz sufrimiento de la Segunda Guerra Mundial demostró al mundo la necesidad de una nueva Europa. Durante un periodo de 70 años, Alemania y Francia han combatido en tres guerras. Hoy una guerra entre Alemania y Francia es impensable. Esto demuestra cómo, por medio de esfuerzos bienintencionados y construyendo una relación de confianza mutua, los históricos enemigos se han convertido en estrechos aliados”, ha explicado Thorbjoern Jagland, presidente del Comité Nobel. También ha subrayado su papel “estabilizador” para transformar una Europa que era “un continente de guerra” en “un continente de paz”.
El premio le llega a la UE en plena crisis económica e institucional El año pasado obtuvieron el Nobel de la paz tres mujeres, la presidenta de Liberia, Ellen Johnson-Sirleaf, la también liberiana Leymah Gbowee y la activista yemení Tawakkul Karman.
El premio le llega a la UE en plena crisis económica e institucional y solo unos días después de que la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI, Christine Lagarde, asegurara que “Europa es el epicentro de la crisis actual”. De hecho, en su discurso el presidente del Comité Nobel ha destacado: “La UE se enfrenta en la actualidad a graves dificultades económicas y a un descontento social importante. El Comité Nobel noruego quiere centrarse en lo que ve como el mayor logro de la UE: la exitosa lucha por la paz y la reconciliación y por la democracia y los Derechos Humanos”.
Por su parte, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Duaro Barroso, ha señalado que “es un gran honor” para la UE haber sido galardonada con el premio Nobel de la Paz. “Es un gran honor para toda la UE y para sus 500 millones de ciudadanos”, ha dicho Barroso mediante un mensaje colocado en la red social Twitter.
La canciller alemana, Angela Merkel, ha calificado la concesión del galardón como una “decisión maravillosa” y ha destacado su carácter de “impulso al euro”, como idea que va más allá de la mera “unión monetaria”. “La UE se construyó sobre las cenizas de dos guerras” y el galardón supone para ella, “personalmente”, un “notable impulso” en los esfuerzos comunes para el proyecto europeo. “El euro es más que una moneda”, añadió, e instó a “no olvidar nunca” que “en el fondo” la divisa común representa un proyecto de “paz conjunta”.
Seis décadas de vida
La UE nació con el anhelo de acabar con los conflictos entre países vecinos tras el desastre de la Segunda Guerra Mundial. La fundación, en 1951, de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA) constituyó el embrión de la UE actual.
El gran salto se dio en febrero de 1992 con el Tratado de Maastricht, que engloba la Unión Política y la Unión Económica y Monetaria Seis años después, en marzo de 1957, Francia, Alemania, Italia, Bélgica, Holanda y Luxemburgo fundaron en Roma la Comunidad Económica Europea (CEE) y la Comunidad Europea de la Energía Atómica (EURATOM) y al año siguiente el Parlamento Europeo se reunió en Estrasburgo por primera vez.
En la década de los años sesenta se fusionaron los órganos ejecutivos de las tres comunidades europeas, se creó la Política Agraria Común (PAC) y se concluyó el desarme arancelario, con lo que los Seis constituyeron una unión aduanera. Tras la adhesión del Reino Unido, Dinamarca e Irlanda en 1973, se introdujo el sufragio universal directo para la Eurocámara en 1979, cuando entró en vigor el Sistema Monetario Europeo (SME).
La década de los ochenta estuvieron marcados por la adhesión de Grecia (1981), España y Portugal (1986), y por la reforma del Tratado de Roma mediante la firma del Acta Única Europea, por la que la CEE pasó a llamarse Comunidad Europea.
El gran salto se dio en febrero de 1992 con el Tratado de Maastricht o Tratado de la Unión Europea, que engloba la Unión Política y la Unión Económica y Monetaria. Además introdujo la cooperación en Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) y en Justicia e Interior.
Supresión de fronteras
Tras la adhesión de Suecia, Finlandia y Austria (1995), entró en vigor el tratado de Schengen -entre España, Portugal, Francia, Bélgica, Luxemburgo, Holanda y Alemania- que inició la supresión de fronteras.
El Tratado de Ámsterdam, que entró en vigor en 1999, modificaba el de Maastricht ampliando los derechos de ciudadanía europea y la cooperación en empleo. Pero el futuro ingreso de diez nuevos candidatos (República Checa, Hungría, Polonia, Eslovenia, Eslovaquia, Lituania, Letonia, Estonia, Chipre y Malta) exigía una amplia reforma.
En 2007, la UE alcanzó los 485 millones de habitantes, la tercera población mundial tras China e India Tras dificultosas negociaciones, se aprobó, en diciembre de 2000, el Tratado de Niza (en vigor desde 2003), que modificó el reparto de poder en las instituciones comunitarias para adaptarlas a la UE ampliada. Además, se aprobó la Carta de Derechos Fundamentales, embrión de la futura Constitución de la UE.
En 2002, tras entrar en circulación el “euro” en doce países, se puso en marcha la Convención Europea, encargada de redactar una Constitución, presentada oficialmente en 2003. En mayo de 2004 tuvo lugar la mayor ampliación de la UE, con el ingreso de diez países y en octubre, los Veinticinco firmaron en Roma el tratado que establecía una Constitución para Europa. Pero el rechazo de Francia y Holanda en sendos referendos supuso el abandono del proyecto.
Con la adhesión de Rumanía y Bulgaria en 2007, la UE alcanzó los 485 millones de habitantes, la tercera población mundial tras China e India. En junio de 2007, a instancias de la canciller alemana, Angela Merkel, los Veintisiete acordaron negociar un tratado de reforma que sustituyera al fracasado proyecto constitucional, firmado el 13 diciembre de 2007 en Lisboa.
Durante 2008 y 2009 fue ratificado por los 27 miembros de la UE y entró el vigor el 1 de diciembre de 2009. Desde entonces la UE tiene un presidente estable, las decisiones por mayoría se extienden a 40 ámbitos más y el poder de voto de cada Estado tiene más en cuenta la demografía, reequilibrando el peso de los más “grandes”.
La Eurocámara obtiene nuevas competencias legislativas y la CE ganará en eficacia e independencia en 2014, cuando el número de comisarios será inferior al de Estados (de 27 a sólo 15). El 19 de noviembre de 2009 los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión, eligieron al belga Herman Van Rompuy, primer presidente estable del Consejo de la UE y a la británica Catherine Ashton, Alto Representante para Asuntos Exteriores y Seguridad.
En enero de 2009, Eslovaquia se convirtió en el país número 16 en adoptar el euro y desde 2011 también cuenta con esta moneda Estonia. Como consecuencia de la crisis financiera que vive la eurozona desde 2009, el 2 de marzo de 2012 los países de la UE, excepto Reino Unido y la República Checa, firmaron el “Tratado para la Estabilidad, la Coordinación y la Gobernanza en la Unión Económica y Monetaria”, para sellar su compromiso con la disciplina presupuestaria.