Mis felicitaciones y recomendaciones al Enriquillo de oro.
Por Frank Jiménez-Tomado del Biran NY.
NEW YORK- Ahora que todos ya han
expresado su parecer sobre los pasados premios Enriquillo de Oro, en el
que todos concluimos en saludar como un gran evento, donde se
conjugaron los diferentes roles que jugamos en la sociedad a la que
servimos, premiando virtudes y esfuerzos, así como también reconociendo a
los que con ahínco les han contribuido a una comunidad que progresa.
Es ahora que agotamos quizás el
último turno para expresar primero mis felicitaciones al equipo
organizador por asumir el reto de presentarles a los barahoneros un
evento sin precedentes, con una producción que cuido y cronometro cada
detalle y que provoco entre los asistentes el acostumbrado pellizco para
saber que no soñaban y se encontraban en la presentación de una
producción de factura barahonera.
Fue una gran idea traer de nuevo
estas premiaciones. Muy oportuna, en momentos en que la comunicación
social está en su más alto nivel, lo que provoca a aquellos nominados y a
los que no tuvieron la oportunidad de ser nominados, a fortalecer y
motivar el trabajo que desarrollan, no solamente la labor propia, sino
la de todos los actores que inciden en el acontecer local y nacional si
se quiere.
Quiero aprovechar la ocasión
para sembrar algunas sugerencias que pueden contribuir a engrandecer más
esa premiación en la próxima entrega, aunque estoy seguro que ese
súper-equipo ya estará tomando notas que engrandecerán cada entra de
esos premios.
La estatuilla.
Ahora que hay tiempo para la
próxima entrega de premios, sería prudente instaurar una imagen del
cacique Enriquillo como marca del evento, en sustitución del premio tipo
“trofeo” que se le entrego a los galardonados.
Reconocimiento Póstumo.
Hacer un reconocimiento póstumo a
munícipes que en vida contribuyeron en algunas de las diferentes
facetas que rigen nuestra sociedad, ya sea en deporte, cultura, arte,
comunicación, etc.
Barahoneros ausentes y de ultramar.
Reconocer el trabajo de los
barahoneros que viven fuera, pero no ausentes y los de ultramar, con lo
que se motivaría a una gran cantidad de buenos barahoneros disperso en
la diáspora a continuar su labor tenaz a favor de un mejor Barahona.
Esos compueblanos que años tras años hacen esfuerzos de poner nuestros valores en alto.
Ojala con estas ideas podamos
fortalecer el exitoso rescate del Enriquillo de Oro, luego de un
merecido descanso que le permitió renacer y conquistar la atención de
todo un pueblo….En hora buena caballeros.
