6th noviembre 2011/www.impactobarahonero.com
La Delincuencia, sus reales causas en el país y una propuesta.
Por Mayobanex De Jesús Laurens
Las estadísticas van en aumento, mientras el tema se convierte
en debate político con el cual se quiere enrostrar toda la culpa al
gobierno de un mal que está latente en el mundo y que ha minado la
sociedad dominicana ante las diversas causas que la generan.
En la República Dominicana, en
todas las épocas se han producido hechos violentos, robos, atracos,
muertes pasionales, casos de drogas y narcotráfico, pero resulta que
ahora hay demasiados medios radiales, televisivos y en la Internet,
donde todo es resaltado y dimensionado de inmediato.
LAS CAUSAS PRINCIPALES DE LA DELINCUENCIA EN DOMINICANA
1.- Los deportados de otras naciones por delitos diversos
2.- La falta de oportunidades en los jóvenes de los barrios
3.- El tráfico y micro tráfico de drogas
4.- La corrupción en la policía y las Fuerzas Armadas
5.- La carencia de un plan coherente y determinativo en el gobierno para combatirla
1.- LOS DEPORTADOS DE OTRAS NACIONES POR DELITOS DIVERSOS
Desde hace ya varios años, hemos venido observando a través de
los medios de prensa la gran cantidad de dominicanos que son deportados
de los Estados Unidos y de Europa, luego de cumplir condena por delitos
diversos en esas naciones.
Una vez llegan a República
Dominicana, esas personas no son vigiladas para dar un seguimiento de
sus futuras actuaciones. Se organizan en el ámbito local, buscan sus
contactos, ex convictos, y comienzan toda una industria delictiva muy
lucrativa, a base de tráfico de drogas y el “sicariato”.
2.- LA FALTA DE OPORTUNIDADES EN LOS BARRIOS
Sabido es de la inmensa cantidad de padres irresponsables que
procrean sus hijos y luego los sueltan a su destino, dada la carencia de
recursos para sostenerlos y la perversidad paternal y maternal generada
en el hogar.
Los niveles de pobreza en los
barrios dominicanos y la falta de oportunidades de empleos provocan
desesperación entre los jóvenes, quienes se ven tentados a meterse al
mundo de la droga y la delincuencia, buscando dar golpes rápidos para
mantener sus vicios y lograr lujos mediáticos.
3.- EL TRAFICO Y MICRO-TRAFICO DE DROGAS
Mientras la Dirección nacional de Control de drogas (DNCD), la
Policía Nacional y las Fuerzas Armadas alegan que el tráfico y
micro-tráfico de drogas está controlado en el país, los puntos de ventas
están de forma silvestre en todos los barrios de los distritos y
municipios de la República Dominicana.
La corrupción en los organismos
policiales y militares llega a tal extremo, que la rutina ha hecho un
gran negocio con los famosos “peajes” que los narcos pagan a diarios a
los encargados de control de zonas en los barrios.
La droga genera violencia armada, hechos de sangre sin piedad y la oportunidad de obtener fortuna ilícita para darse la gran vida. Ya son pocos los que quieren trabajar trescientos sesenta y cinco días todos los años para sostener dignamente a sus familias.
4.- LA CORRUPCION EN LA POLICIA Y LAS FUERZAS ARMADAS
Para nadie es un secreto que en todos los casos de drogas en el
país están implicados policías y militares. Es una mafia que existe
desde hace muchos años, de tal forma que salpica a generales, coroneles,
capitanes y a muchos rangos de los organismos de seguridad del Estado.
Es imposible que puedan
justificar con los salarios que han devengado en el tiempo los niveles
de fortunas que ostentan, que van desde mansiones, varias “yipetas”,
queridas, fincas y grandes gastos mensuales.
5.- LA CARENCIA DE UN PLAN COHERENTE Y DETERMINATIVO EN EL GOBIERNO PARA COMBATIRLA.
Tapar el sol con un dedo y darle el color morado a favor al
tema es una irresponsabilidad. Cierto es que ha sido en el presente
gobierno cuando más golpes se le ha dado al narcotráfico, pero justo es
reconocerlo que el incremento del flagelo va en aumento, ante las
miradas de los responsables para detenerlo.
Se han estado improvisando
acciones, operativos conjuntos, trabajos de inteligencia, compras de
equipos sofisticados y acciones directas en los barrios. Se apresan al
micro-traficante y se atrapan de forma sorpresiva a los grandes
traficantes.
Pero se carece de un plan
estratégico bien estructurado, de mediano y largo plazo, que ponga bajo
relieve los antecedentes históricos de las drogas y la violencia en el
país. Estudiar sus antecedentes históricos, las causas del incrementos
en el tiempo, recursos necesarios para los operativo, plan de acción
coordinado, personal capacitado para enfrentar los males en varias
direcciones y una campaña de concienciación mancomunada con los medios
de comunicaciones y toda la sociedad civil en su conjunto.
NUESTRA HUMILDE PROPUESTA
La delincuencia requiere de un gran foro internacional para
discutir el tema, anteponiendo los intereses nacionales por encima de
los colores partidarios. Traer al mismo a expertos de varios continentes
en los casos de drogas, combate y programas de concienciación
ciudadana.
Elaborar un plan conjunto,
emanado de las propuestas aprobadas en ese foro. Gestionar de inmediato
las vías de recursos a nivel interno y externo, e implicar a toda la
sociedad en las acciones de combate y prevención de las drogas y la
violencia en el país.
Actuar sobre las causas reales
con un plan desglosado por áreas, tomando como referencias los cinco
puntos que hemos abordado en el presente artículo.
Lo anterior requiere,
lógicamente de cambio de actitudes, incentivos a los organismos de
combate, modernización de esas instituciones, equipamiento adecuado,
labor de inteligencia, campaña de prevención, acciones conjuntas,
mejorar las condiciones barriales y programas de educación y rehabilitación.