Había ingresado a una clínica de Madrid con un problema respiratorio.
Fotografía de archivo, tomada en
Madrid el 25/11/2002, del expresidente del Gobierno Adolfo Suárez, el
primer presidente de la democracia española que ha fallecido hoy.
EFE/ARCHIVO/Bernardo Rodriguez
EFE
Madrid, España
El expresidente del Gobierno
español Adolfo Suárez, de 81 años, político clave en la transición
democrática, falleció hoy en Madrid.
Fuentes familiares informaron
del fallecimiento de Suárez, que estaba desde el pasado lunes en una
clínica de Madrid, donde había ingresado con un problema respiratorio.
Aunque el expresidente (1976-81)
había mejorado de la neumonía, su estado general empeoró en estos días,
ya que Suárez sufría la enfermedad de Alzheimer desde hace años y no
tenía presencia pública desde 2003.
Su propio hijo, Adolfo Suárez
Illana, fue el encargado este viernes por la mañana de poner sobre aviso
a la sociedad española al convocar una rueda de prensa en la clínica en
la que confirmó que la muerte de su padre era “inminente” debido al
agravamiento de la dolencia neurodegenerativa que padecía.
Nacido en septiembre de 1932 en
Cebreros (centro) Adolfo Suárez está considerado mayoritariamente como
un político con un papel decisivo en la transición española desde la
dictadura franquista (1939-75) a la democracia.
Procedente del propio régimen
franquista, en el que ocupó algunos cargos importantes, Suárez fue el
designado por el rey Juan Carlos en 1976 para dirigir el desmontaje de
esa estructura y seguir la vía democrática.
Durante su gobierno se aprobaron
leyes que reconocían libertades y fueron legalizados los partidos
políticos, incluido el comunista, lo que granjeó al político fallecido
la enemistad de sectores de la derecha tradicional española y del
Ejército.
En 1978, gracias al consenso general de las fuerzas políticas, fue aprobada la Constitución que hoy sigue en vigor.
Todo ello en unos años
especialmente difíciles, con el azote del terrorismo, que a finales de
los años 70 y comienzos de los 80 generaba varios muertos a la semana.
El partido que creó, Unión de
Centro Democrático, vivió una creciente división y Suárez fue cada vez
más cuestionado dentro y fuera de su formación.
El clima general llevó a que
dimitiera a finales de enero de 1981, unas semanas antes del intento de
golpe de Estado, que tuvo lugar el 23 de febrero con la entrada de
guardias civiles en el Congreso de los Diputados mientras se celebraba
la investidura de su sucesor, Leopoldo Calvo-Sotelo.
Todavía continuó en política una
década más, con otro partido, el Centro Democrático y Social, y de
nuevo volvió a ser diputado, pero dejó la primera línea de actividad a
comienzos de los 90.