abc/Tomado de abc.es
Victoria Beckham, Shakira o Irina Shayk son algunas de las «WAG» más famosas
Se ha ido instalando entre
nuestro vocabulario habitual, y ya pocos se extrañan cuando escuchan la
palabra «WAG». Para los que aún desconozcan el significado que se
esconde detrás de estas siglas, bajo el término se engloba a las esposas
y novias de los futbolistas –en inglés, «Wives and Girlfriends»–. Es
habitual que entre las características de estas mujeres se encuentre una
envidiable forma física, un trabajo delante de las cámaras o una
profesión relacionada con la moda.
Entre estas últimas, Irina Shayk
es el ejemplo más notorio. La modelo rusa es novia de Cristiano Ronaldo
y sus desfiles sobre la pasarela además de innumerables colaboraciones
con marcas publicitarias le han supuesto un puesto de honor entre las
«WAG» del Real Madrid. Sara Carbonero es otra de las grandes destacadas
del club merengue. En este caso, la manchega conoció a Iker Casillas
gracias a su trabajo en televisión como presentadora de noticias
deportivas; lo mismo que le sucedió a Melissa Jiménez con Marc Bartra.
Pilar Rubio conoció a Sergio Ramos después de largos periodos en la
pequeña pantalla.
Algunas «WAG» son conocidas a nivel mundial Igual que en el caso de Irina Shayk, hay más muestras de «WAG» reconocidas a nivel internacional. Quizá la primera de la lista sería Shakira, que además de ser novia del futbolista Piqué es una cantante de reconocido prestigio y fama mundial. En esta línea también podría englobarse a Victoria Adams, nombre de soltera con el que se conocía a la ex Spice Girl y actual esposa de David Beckham –exfutbolista con quien acaba de comprar una casa en un barrio de Brasil conocido por sus antiguos casos de narcotráfico y tráfico de armas–.
Otras «WAG», por el contrario,
no forman parte del mundo de la prensa rosa y tiemblan cada vez que
tienen que enfrentarse a una cámara o un micrófono. Es el caso de Marta
Domínguez, la nueva novia de Courtois –jugador del Atlético de Madrid–,
que preserva su intimidad con perfiles privados en Twitter y Facebook.
La joven canaria trabaja en una tienda de ropa de un centro comercial
del norte de Madrid y busca por todos los medios mantener su vida
alejada de la atención pública.