Tomado de Diario Libre/Foto de archivo
SANTO DOMINGO. La
Superintendencia de Bancos recomendó a la Fiscalía del Distrito Nacional
incluir como imputados a trece personas en la comisión de delitos a lo
interno del Banco Peravia, donde alegadamente se otorgaron 1,292
créditos fraudulentos, que representan un monto de RD$1,419.71 millones.
Sostiene que esos recursos
equivalen al 75.3% del total de la cartera de crédito de la entidad, que
a la fecha de notificación de la disolución ascendía a RD$1,881.03
millones.
En un informe remitido a la
fiscal Yeni Berenice Reynoso, la Superintendencia de Bancos afirma que
pueden ser incluidos como imputados, de manera enunciativa, no
limitativa, Nelson Serret Sugrañez, Carlos Alberto Serret Sugrañez,
Jorge Serret Sugrañez, José Luis Santoro, Gabriel Jiménez Aray, Luis
Manuel Peña y Daniel Morales Santoro.
Asimismo, Nelson Cabral Veras,
Rolando Cabral Veras, Yesenia Serret, Jocelyn Leal, la contadora pública
autorizada Génova Isabel Torres, quien supuestamente rindió los
informes contables de más del 90% de los préstamos, y el notario público
Moisés Barinas Villalona, quien presuntamente legalizó los contratos
fraudulentos.
El informe de la
Superintendencia recomienda incluir a cualquier persona que pudiese
resultar responsable, una vez la Fiscalía concluya con las
investigaciones.
“Las investigaciones realizadas
por el Ministerio Público, hasta la fecha evidencian que efectivamente,
lleva razón el órgano regulador, ya que de los interrogatorios,
allanamientos, secuestro de propiedades y otras diligencias de
investigación que ha realizado el Ministerio Público, hasta la fecha se
desprende que los imputados tienen responsabilidad absoluta frente al
presente proceso”, subraya la Fiscalía.
Expone que aunque José Luis
Santoro era miembro del Comité Ejecutivo del banco, en la práctica tenía
una co-presidencia con Gabriel Jiménez Aray, como lo evidencian las
supuestas maniobras que hacía la entidad, las órdenes que daba e incluso
impartía en el mismo piso.
“Otra modalidad de las
operaciones irregulares consistía en el otorgamiento en un sólo día de
varias tarjetas de crédito con límites altos en favor de personas que no
reunían el perfil para ser beneficiados de montos tan elevados”.
Agrega que en los expedientes de
esos clientes no cuentan con las solicitudes firmadas, los contratos de
autorización para la emisión de tarjetas ni los acuses de recibo. Dice
que sólo contaban con autorización de un correo de parte de José Luis
Santoro y Gabriel Jiménez Aray.
Se constató que el mismo día de
emisión de una tarjeta se realizaban retiros de dinero en efectivo en
cajeros automáticos por montos equivalentes al 50% de los límites, y
entre los 5 y 7 días luego de su expedición, consumían el total del
crédito aprobado, sin que se realizaran pagos a favor del banco.
Establece que durante los años 2012-2014, Santoro realizó transferencias
directas por el monto de US$796,768, los cuales se realizaban desde su
cuenta.