Benny Rodríguez
Villa Central, Barahona/Tomado de Listin Diario
A
las 10:30 de la mañana de hoy, un día normal de docencia en la escuela
básica Anaima Tejada Chapman, de este municipio, se rompió luego de una
bomba lacrimógena, lanzada hacia el interior del plantel, provocara un
caos entre el personal docente, administrativo y estudiantil.
Varios
padres alumnos y alumnas se presentaron en la escuela en buscar a sus
hijos e hijas para llevarlos a casa, por lo que las labores docentes se
vieron interrumpidas en más de un 60 por ciento.
Sin
embargo, la directora del plantel educativo, profesora Elisaida Reyes
Romero, tras ser consultada por LISTÍN DIARIO, orientó a los docentes a
no despachar a los estudiantes a sus casas, ya que la situación está
bajo el control de las autoridades.
“Si
los padres insisten en llevarse a sus hijos a sus casas, no podemos
nosotros negarnos a ello, y hemos orientado al personal docente para que
les digan a los padres que la situación está bajo control”, dijo Reyes
Romero.
Narró que la bomba lacrimógena fue lanzada por la parte trasera del plantel, cerca de las aulas de preescolar.
Al
centro de estudios del nivel básico se presentó el presidente municipal
de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), Miguel Ángel Feliz, y
miembros de la Dirección Regional Sur de la Policía, al mando de un
oficial, quienes indagaban las causas del hecho.
Segundo caso en el año
Es la segunda vez en este año que una bomba lacrimógena es lanzada al interior de un centro educativo de esta comunidad.
En
enero fue arrojada una bomba frente a la dirección del liceo secundario
José A. Robert, por la que resultaron afectadas dos profesoras del
centro, una de ellas embarazada.
Según
las investigaciones que se efectuaron sobre este hecho, la bomba habría
sido lanzada por estudiantes del centro, pero en esa ocasión no se
explicaron las razones ni se ofrecieron detalles de sanciones a los
alumnos responsables.
Resultaron
afectadas las profesoras Estebanía Ferreras y Cándida Pineda, está
última embarazada, ambas fueron llevadas a centros de salud donde
recibieron atenciones médicas.