Tomado de Diario Libre
Tal
vez no sea una estrategia de campaña, pero la experiencia vivida con el
presidente de Panamá indica que invitar mandatarios de la región podría
ser el mejor marketing para la reelección.
Llevarlo
por aquí o por allí, y mostrar los logros de la actual gestión tiene un
efecto subliminal, pues la reacción del visitante siempre será cortés.
Además
de que un reconocimiento hecho por una personalidad de fuera, y mucho
más si es un Jefe de Estado, dispondría a su favor el ánimo de la
población.
El
presidente Varela se fue encantado, pero más encantado quedó el
anfitrión, pues comprobó que sus políticas encuentran eco y crean
escuela en el exterior.
¿Cuál
es el buque insignia de esta administración? Sin dudas que la tanda
extendida en las escuelas, incluido el almuerzo, que en la ocasión fue
más abundante y sabroso.
No fue comida para estudiantes, sino para presidentes.
¿Cuál
es la acción ejecutiva que más aprecia el gobernante dominicano? Oh,
las visitas sorpresa. Con una de ellas sorprendió a su huésped, como el
niño que enseña al vecino su juguete nuevo.
Quizás no fue parte de la estrategia, pero como marketing quedó bonito.