César Medina/Tomado de Listin Diario
Después
que el Partido Reformista desertó del Bloque Progresista y se tomó unas
vacaciones en su vieja alianza con el PLD --porque de que vuelve,
vuelve--, cobra mayor importancia para el presidente Danilo Medina su
acuerdo con el Partido Revolucionario y con Miguel Vargas.
A
partir de ese nuevo escenario, nada de lo que pueda dar el gobierno al
PRD es demasiado y después de los resultados del 15 de mayo cualquier
cosa será poca porque su votación será alta, muy superior a la que dicen
las encuestas y creen los propios peledeístas.
Pudiera
ocurrir, incluso, que la diferencia en las elecciones la aporte el PRD y
que Danilo logre la reelección de forma holgada gracias al elevado
caudal de votos en la casilla número uno. Puedo vaticinar --y apúntenlo
por ahí--, que el partido blanco se acercará al 15 por ciento del
sufragio.
No
es una afirmación peregrina, sólo hay que recordar que el PRD jamás en
su historia de 77 años ha dejado de obtener una alta votación, ni
siquiera rendido a la adversidad como en 1990 cuando Peña le propuso a
Bosch apoyarlo sin condiciones y Bosch lo rechazó también sin
condiciones.
En
la ocasión, el PLD le recomendó al PRD “que se fuera solo” y Peña así
lo hizo y sacó el 23 por ciento en unos comicios bipolarizados entre los
dos viejos caudillos, Balaguer y Bosch. Fue la diferencia para que
Balaguer se quedara en el poder.
… Ha sido su historia
En las elecciones de 1986 el PRD fue a las elecciones con una grave
fractura interna y le ganó a Balaguer aunque fue Balaguer el que cobró
como producto precisamente de esa fractura.
En
1990 fue dividido en dos mitades casi iguales con Jacobo postulado por
el PRI y Peña por el PRD, y los dos juntos sacaron más votos que
Balaguer y que Bosch que se pelearon el triunfo.
“Al
contar fue el llorar” para quienes desdeñaron la fuerza perredeísta
ofrecida en términos de gratuidad y rechazada imprudentemente.
A
partir de entonces el PRD se revitalizó y reconquistó las mayorías
electorales con Peña como abanderado en 1994 y en 1996. Ya Peña
fallecido, el PRD ganó los comicios de medio término de 1998 y los
presidenciales del 2000. Y si perdió en 2004 fue por los desatinos de
Hipólito Mejía.
…Pero
siempre ha estado dando la batalla, compitiendo, peleando y sin bajar
nunca su votación del 43 por ciento, como en 2008 frente a la reelección
de Leonel, y en 2012 por poco se cuela Hipólito al sacar el 47 por
ciento.
Un ejercicio curioso…
Es probable que la reelección de Danilo Medina estuviera seriamente
amenazada de no haberse producido el acuerdo con el PRD y con Miguel
Vargas… No fuera igual si el frente opositor estuviera compuesto por el
PRD, el PRSC y el PRM, y el PLD hubiese quedado sólo con el apoyo de los
aliados pequeños, empezando por el posicionamiento de la casilla
opositora… …No es lo mismo estar en la casilla uno y en la tres, con el
PLD en medio de las dos, que postular la reelección en la casilla uno,
dos, cuatro y cinco con Abinader solo en la tres y luego en la siete, la
catorce, la diecinueve y la 22… Todo eso influye en la caseta de
votación.