Maria Teresa Morel/Tomado de El Caribe
Como
si no bastara un proyecto de ley que el año pasado prohibió el uso de
la hookah en lugares públicos, el Ministerio de Salud publicó una
resolución que impide el uso de estos artefactos en lugares cerrados
bajo techo.
Para
justificar la medida, el órgano encargado de trazar la política
sanitaria del país, argumenta que estudios realizados en el sector
universitario revelan que 61 de cada 100 estudiantes utilizan la llamada
pipa de agua como método de consumo de tabaco más prevalente.
En
uno de sus considerandos la resolución 03-2017, establece que el humo
producido por la Hookah contiene un sinnúmero de toxinas conocidas que
atentan contra la salud, tanto de los fumadores activos como pasivos,
tales como nicotina, monóxido de carbono, alquitrán, metales pesados,
tales como cobre, plomo, zinc, cromo y cadmio, así como aldehídos
volátiles tales como el formaldehido, un preservante químico usado en
las funerarias para embalsamar cuerpos muertos.
Asimismo,
señalan que el uso no regulado de la pipa de agua o hookah, ha afectado
la salud de la población dominicana, incluyendo menores de edad,
causando una alta tasa de mortalidad, y por ende, una alerta en el
sector salud.
La
resolución que prohíbe la venta, obsequio, distribución y promoción del
artefacto entre menores de 18 años, también establece que los mismos no
podrán ser publicitados o promocionados en lugares destinados a menores
de edad, en las proximidades de centros educativos y en eventos o
espectáculos dirigidos a menores.
Indica
que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha comprobado que
mediante el uso de hookah la absorción del veneno cardiovascular, el
monóxido de carbono, puede ser muy elevada a causa de los grandes
volúmenes inhalados y al hecho de que la fuente de calor suele ser
carbón o brasas que arden sin llama, lo que genera altos niveles de
monóxido.