EL ARTE DEL SILENCIO...
Por Mayobanex De Jesús Laurens...Estilo Bloguero.
De
forma magistral, el presidente Danilo Medina Sánchez afrontó los
grandes retos mediáticos, manejó las estrategias, movió las fichas y se
sobrepuso a marejadas, tempestades y tsunamis, saliendo airoso de ellos.
El
tema Odebrecht, desde Brasil, se impuso con fuerza en la República
Dominicana, unió en un propósito a la oposición, que quiso pescar en río
revuelto organizando decenas de marchas en todo el país.
Manejando
el Arte del Silencio, Danilo Medina actuó. Dejó la Justicia que jugara
su rol. Se dio a conocer listado de presuntos implicados en caso
sobornos Odebrecht, llegaron los apresamientos, los jueces en la Suprema
Corte de Justicia emitieron sentencias, una con medidas de coerción
preliminar, y otra dictando solo prisión domiciliaria y presentación
periódica a juicio.
Las
marchas continuaron, se organizó la “magna caminata” contra la
impunidad y la corrupción, con el tema haitiano sacando casi este debate
del tapete, dando la bienvenida con fuerza a las escogencias de los
magistrados en las denominadas Altas Cortes (Tribunal Superior Electoral
y Suprema Corte de Justicia).
Ante
la presión mediática opositora para que los jueces no repitieran,
Danilo obró con suma sagacidad y maestría, evaluó bien y coordinó para
que el Consejo Nacional de la Magistratura hiera muy buena selección,
valorada como positiva por la gran mayoría de la población dominicana.
El
primer mandatario nunca descansó. Continuó con su ritmo de trabajo,
inaugurando obras, reiniciando las visitas sorpresas, participando en
eventos y sosteniendo reuniones con sus ministros y directores.
Ante
los ataques opositores de los economistas del patio, ahora la
prestigiosa firma calificadora de riesgo Moody’s, valora el alto
crecimiento económico de nuestro país y mejora los niveles de
deuda-riesgo, importante para las inversiones y proyección a nivel
internacional.
Ya
lo había escrito. A Danilo lo conocíamos en el Partido de la Liberación
Dominicana como el gran estratega. Una “computadora humana” le decía
Juan Bosch. Pero lo que los peledeístas y dominicanos, todos en sentido
general, desconocíamos era la capacidad de estadista que pudiera tener
el actual mandatario.
Demostrado
ha quedado. Es magistral estratega y excelente estadista. Sin dudas,
Danilo Medina ha dado cátedras del Arte del Silencio.