Por Mayobanex De Jesús Laurens…Estilo Bloguero/Twittero
DANILISMO VS LEONELISMO…Dos corrientes a lo interno del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), encabezadas por dos grandes líderes que conocen muy bien de tácticas y estrategias: Danilo Medina Sánchez y Leonel Fernández Reyna.
Ellos están encabezando una guerra política muy fina, que el “galloloquismo” lo ve con pasión desenfrenada, mientras que los que han leído los libros clásicos de: El Político, El príncipe, Fouché, Las 48 Leyes del Poder, El Arte de la Prudencia, El Arte de la Guerra y El Nuevo Príncipe, entre otros, saben que lo que se está dando en el ámbito morado es una lucha muy fina de táctica y estrategia política.
Leonel analiza y vigila cada posible paso del danilismo, actuando conforme a las circunstancias del momento y estrategia bien definida, mientras que Danilo, conocedor del accionar del ex mandatario, le tiene el perfil tomado, visualiza cada paso y establece su plan estratégico.
Cada manifestación de Fernández contra la modificación constitucional es parte de prepósito preconcebido, a sabiendas y conocedor del “Hombre de Palacio”. De su lado, Medina mide los plazos fatales, sabe como desesperarlo y trabaja como hormiga en la dirección de la reforma a la Carta Magna.
Ambos tienen dos grandes equipos estratégicos. Envían las señales y se mantienen al margen, hablando del tema en ocasiones, dejando que sus principales dirigentes en los equipos se expresen por los medios.
Danilo buscará por todos los medios la habilitación de su precandidatura, para luego inscribirla y participar en Primarias Abiertas en su partido, frente al actual presidente del PLD. Por su parte, Leonel intenta por todas las vías evitar la modificación de la Constitución para la repostulación al primer mandatario. Sabe que si eso sucede, estaría en la misma posición del 2007, cuando Medina lo enfrentó y fue vapuleado por las bases.
Lo que estamos viendo y escuchando cada día en los medios radiales, televisivos, escritos y en Redes Sociales no es más que una real guerra sin armas de planteamientos tácticos y estratégicos de dos líderes que se conocen muy bien y que miden cada paso antes de darlos.
Los idiotas, desenfrenados, apasionados, “galloloquismo”, sin estudios y sin conocimientos políticos, ven ese accionar con ofensas descalificadoras, entendiendo que si la posición planteada no favorece sus intereses, hay que vapulearla, sin reparar en honras de las personas