Osorio es sumamente inteligente, diligente, respetuoso, decente, que ha estado presente desde su juventud en todos los ámbitos desarrollistas de la vida pública e institucional de nuestra querida Perla del Sur.
Lo pecuniario no es un tema en su accionar, pues su vocación de servicio no tiene precio. Siempre dispuesto, sin mirar honorarios ni estar pendiente a pagas. Si la labor que realiza es desde una posición en que ha sido designado, pues su salario es otra cosa.
Durante varias gestiones de gobiernos, Osorio ha estado ahí, poniendo su labor profesional al servicio del desarrollo de Barahona. Es una especie de “utility”, que su alto valor profesional lo llevan a que sea considerado de “gran aporte”.
La honorable gobernadora Diones Maribel González Medrano, conocedora de esas cualidades del destacado profesional de referencia, ha visto en esa persona sus habilidades técnicas y profesionales, que a su entender le puedan contribuir a agilizar los procesos estatales que se requieren desde el Ejecutivo, con la urgencia y prestancia de lugar.
Tildarlo de político militante es un error. Él le sirve a quien requiera de sus capacidades para hacer trabajo de equipo, avanzar y lograr los objetivos y metas propuestas. Es como una especie de Valdez Albizu en el Banco Central. Ese ha sido y siempre será su rol.