Diario Libre/Tomado de Diario Libre
Santo Domingo - feb. 02, 2022 | 11:19 a. m. | 3 min de lectura
La Superintendencia de Bancos anunció este miércoles que tomó control de Bancamérica para iniciar su disolución, conforme a lo dispuesto por la Junta Monetaria en su Segunda Resolución del 28 de enero de 2022.
De acuerdo con un comunicado emitido en forma de pregunta frecuente, Se trata de un proceso de salida ordenada del sistema establecido en la Ley Monetaria y Financiera, que significa que , durante el período de disolución, el personal designado por la Superintendencia de Bancos ejercerá las funciones y facultades de los accionistas, del consejo de administración, los gerentes, administradores y apoderados generales de la entidad.
De acuerdo con la superintendencia “la disolución de Bancamérica fue dispuesta por la Junta Monetaria mediante su Segunda Resolución del 28 de enero de 2022. La medida se debió a que el banco incumplió con disposiciones legales y normativas en el marco de un plan de regularización”.
Razón por la que la Superintendencia de Bancos tomó el control de la entidad para disolverla. Inicialmente, durante este proceso, verificará los activos (préstamos, inversiones, inmuebles, entre otros) y pasivos (depósitos y otras obligaciones con terceros) para transferirlos a otra entidad de intermediación financiera mediante un proceso de licitación transparente y competitivo, dentro de los próximos 30 días”.
Al momento de iniciar el proceso de disolución se suspenden las operaciones de la entidad. Las sucursales permanecerán abiertas para el ejercicio de determinadas actividades, tales como el cobro de préstamos y tarjetas de crédito o el ofrecimiento de información al público y, a partir del 7 de febrero de 2022, la validación de los depósitos.
La validación es el proceso mediante el cual se verifica la titularidad de los depósitos. Para que este proceso fluya es importante que los usuarios presenten las evidencias correspondientes, tales como certificados de depósito originales, libretas de ahorros, tarjetas de débito, cédula de identidad, entre otros documentos.
Los depósitos del público en las entidades de intermediación financiera autorizadas están garantizados implícitamente hasta un monto de RD$1,860,000 (un millón ochocientos sesenta mil) por depositante. El 98.1% de los depositantes de la entidad tiene ahorros por debajo de este umbral.
En caso de que los depósitos de un usuario superen esta suma, la diferencia será cubierta en la medida en que los activos de la entidad sean realizados (es decir, que sean vendidos). La Superintendencia de Bancos vela por la preservación del valor de los activos con el propósito de que los depositantes experimenten el menor impacto posible.