Santo Domingo - oct. 23, 2024 |
Uno de los temas más populistas que salió a relucir durante las vistas públicas del proyecto de Ley de Modernización Fiscal fue la eliminación del financiamiento público de los partidos políticos.
En el 2024, un año electoral, los partidos del sistema recibieron US$86 millones de fondos entregados por la Junta Central Electoral, o lo que es igual a unos RD$5,100 millones.
Muchos se indignan y consideran que las organizaciones políticas no deberían recibir un centavo público.
De hecho, recientemente al presidente Luis Abinader se le planteó en LA Semanal y éste lanzó el reto a la oposición.
¿Pero realmente sabemos lo que significa ahogar económicamente a los partidos?
Primero, se abren las puertas a los financiamientos ilícitos y/o no regulados porque de alguna manera intentarán sobrevivir.
Segundo, se debilita la democracia pues los que estén en oposición no tendrán las mismas oportunidades que los oficialistas.
Y lo más sencillo de todo: la eliminación de los financiamientos de los partidos nos han dado la Venezuela, Nicaragua y Cuba que hoy tenemos. ¿Queremos eso?