Tomado de N Digital
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este lunes que fijará un nuevo plazo de “10 o 12 días” al mandatario ruso, Vladimir Putin, para que ponga fin a la guerra en Ucrania, iniciada en febrero de 2022.
“Voy a poner un nuevo plazo de unos 10 o 12 días a partir de hoy. No hay razón para esperar, simplemente no vemos que se esté haciendo ningún progreso”, declaró Trump ante periodistas durante una reunión con el primer ministro británico, Keir Starmer, celebrada en Escocia.
El líder estadounidense no ofreció detalles sobre las consecuencias que implicaría el incumplimiento de este nuevo límite temporal ni aclaró si esta decisión fue coordinada previamente con aliados europeos o con el gobierno ucraniano.
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Mientras tanto, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, insistió en que cualquier cumbre entre Kiev y Moscú debe contar con la participación “imprescindible” de Europa. En reiteradas ocasiones, Zelensky ha señalado que la presencia de actores internacionales es fundamental para lograr avances concretos hacia la paz y garantizar la integridad territorial de su país.
Las declaraciones de Trump se producen en un contexto de estancamiento diplomático y militar en el conflicto. A pesar de los esfuerzos de mediación en foros internacionales, la guerra continúa causando pérdidas humanas y daños estructurales a gran escala, mientras se intensifican las sanciones económicas y la presión internacional sobre el Kremlin.
La invasión rusa a Ucrania comenzó el 24 de febrero de 2022, cuando el presidente Vladimir Putin ordenó una ofensiva militar a gran escala sobre territorio ucraniano, bajo el argumento de proteger a las regiones separatistas prorrusas de Donetsk y Lugansk y frenar la expansión de la OTAN hacia el este.
Desde entonces, el conflicto ha dejado decenas de miles de muertos, millones de desplazados y una profunda crisis humanitaria en distintas zonas del país. Además, la guerra ha alterado el equilibrio geopolítico europeo, intensificado la carrera armamentista y disparado los precios globales de la energía y los alimentos.
Estados Unidos, junto con la Unión Europea y otros países aliados, ha impuesto un amplio paquete de sanciones económicas contra Rusia y ha suministrado asistencia militar y humanitaria a Ucrania, lo que ha prolongado el enfrentamiento y bloqueado múltiples intentos de negociación.
Pese a los esfuerzos diplomáticos impulsados desde Naciones Unidas, Turquía, Suiza y países árabes, no se ha logrado un alto el fuego duradero ni avances hacia una solución política integral. Las tensiones en el campo de batalla persisten, particularmente en el este y sur de Ucrania, donde continúan los ataques con drones, artillería y misiles.