A INGRID MONTERO, IN MEMORIAM…
Réquiem por una gran mujer, excelente profesional, que lucho por la vida hasta ser vencida por la muerte.
Ingrid se cansó de estar despierta. La dominó el batallar implacable por vencer el óbito, que la acechaba a todas horas, queriendo llevarla con ella. Pero el deceso vino de blanco, y fueron los ángeles que cargaron su alma para llevarla al cielo.
Montalvo Varona, no solo fue esposo y compañero fiel. Puso más que eso, siendo gran soporte en todos los aspectos para intentar que ella tuviera la alegría de seguir viendo la luz y participando en la vida activa, no obstante el avance de una enfermedad que cedía y reaparecía con fuerza.
Adiós, Ingrid…paz a tu alma. Sentido pésame a toda tu familia. (MDJL).