Japón lanza una operación de emergencia para evitar una fusión
Los residuos radiactivos del reactor 4 quedan al descubierto en la piscina. -Un camión inyectará agua en la piscina del reactor 4. -Helicópteros rocían el reactor 3. -La operación es vital porque una fusión de los residuos dificultaría seguir con las operaciones. -EE UU alerta de que la radiación es extremadamente alta . -El OIEA confirma que los núcleos de los reactores 1, 2 y 3 corren riesgo de fusión.- Washington pide a sus ciudadanos que no se acerquen a menos de 80 km y Londres les dice que se planteen dejar Tokio
GEORGINA HIGUERAS / YOLANDA MONGE Niigata (ENVIADA ESPECIAL) / Washington 17/03/2011 (Cortesía de El País).
Medidas desesperadas para una situación desesperante. Una operación de emergencia ha comenzado en la central de Fukushima. Los reactores 3 y 4 están perdiendo mucha agua y su temperatura sube alarmantemente, ante lo que el Gobierno japonés ha decidido refrigerarlos por las bravas. Primero optó por rociar con agua de mar el reactor 3 (el más peligroso porque contiene plutonio en lugar de uranio) usando helicópteros del Ejército que lanzaron en cada uno de sus cuatro vuelos 7.500 litros. A pesar de que el reactor 4 es en este momento prioritario por los altos niveles de radiación que desprende, son esas mismas emisiones las que desaconsejan una operación aérea sobre él. El Ministerio de Defensa dio el visto bueno a la operación pese a que el miércoles la había cancelado por el excesivo nivel de radiación; aunque ésta no ha desaparecido, parece más urgente la necesidad de frenar el calentamiento de los reactores. La operación se ha limitado a 40 minutos al día para evitar una contaminación excesiva.
Los residuos radiactivos del reactor 4 quedan al descubierto en la piscina. -Un camión inyectará agua en la piscina del reactor 4. -Helicópteros rocían el reactor 3. -La operación es vital porque una fusión de los residuos dificultaría seguir con las operaciones. -EE UU alerta de que la radiación es extremadamente alta . -El OIEA confirma que los núcleos de los reactores 1, 2 y 3 corren riesgo de fusión.- Washington pide a sus ciudadanos que no se acerquen a menos de 80 km y Londres les dice que se planteen dejar Tokio
GEORGINA HIGUERAS / YOLANDA MONGE Niigata (ENVIADA ESPECIAL) / Washington 17/03/2011 (Cortesía de El País).
Medidas desesperadas para una situación desesperante. Una operación de emergencia ha comenzado en la central de Fukushima. Los reactores 3 y 4 están perdiendo mucha agua y su temperatura sube alarmantemente, ante lo que el Gobierno japonés ha decidido refrigerarlos por las bravas. Primero optó por rociar con agua de mar el reactor 3 (el más peligroso porque contiene plutonio en lugar de uranio) usando helicópteros del Ejército que lanzaron en cada uno de sus cuatro vuelos 7.500 litros. A pesar de que el reactor 4 es en este momento prioritario por los altos niveles de radiación que desprende, son esas mismas emisiones las que desaconsejan una operación aérea sobre él. El Ministerio de Defensa dio el visto bueno a la operación pese a que el miércoles la había cancelado por el excesivo nivel de radiación; aunque ésta no ha desaparecido, parece más urgente la necesidad de frenar el calentamiento de los reactores. La operación se ha limitado a 40 minutos al día para evitar una contaminación excesiva.
Se acercan a 13.000 los muertos y desaparecidos por el temblor de Japón
Alerta por radiación en la central de Fukushima I
GRAFICO - El Pais - 16-03-2011
Situación de los reactores de la central de Fukushima afectados por el terremoto y el tsunami. - EL PAÍS
La crisis más grave desde 1945
FOTOS - KOJI SASAHARA (AP PHOTO) - 13-03-2011
Evacuados de sus casas. Habitantes de Tagajo (cerca de Sendai, al noreste de Japón) son evacuados de sus hogares tras el maremoto del 11 de marzo.- KOJI SASAHARA (AP PHOTO)
La crisis más grave desde 1945 - Evacuados de sus casasLa crisis más grave desde 1945 - Sin hogarLa crisis más grave desde 1945 - Devastación en OnagawaLa crisis más grave desde 1945 - Reacciones a la catástrofeLa crisis más grave desde 1945 - Recuento de dañosLa crisis más grave desde 1945 - En barca.Otras fotografías 1 de 28 Japón
A FONDO
Capital: Tokio.Gobierno:Monarquía Constitucional.Población:127,288,419 (est. 2008)La noticia en otros webs
•webs en español
•en otros idiomas
Un camión cisterna de la policía metropolitana ha llegado ya a la central para comenzar a inyectar agua en la piscina del muy problemático reactor 4 -ya ha sufrido dos incendios y su carcasa está arrasada- a través de un agujero en el muro. Si las barras de residuos altamente contaminantes que contienen esta piscina se fusionan, el material radiactivo saldrá a la atmósfera. "Esta operación tiene que ser exitosa", han explicado ingenieros de Tepco en la televisión japonesa NHK. "Es prioritario que tenga éxito: de eso dependen las demás intervenciones", aseguraban. Si no se consiguiera evitar esa fusión, los niveles de radiación serían demasiado altos como para que los trabajadores pudieran seguir participando en las labores de extinción de incendios y refrigeración.
Las radiaciones en la central, seriamente dañada por el terremoto y el tsunami del pasado viernes han sido evaluadas como "extremadamente altas" por la Comisión Reguladora Nuclear de Estados Unidos. El presidente de ese organismo, Gregory Jaczko, ha dicho en una comisión parlamentaria que hay "altos niveles de radiación" alrededor del reactor 4, lo que complica el trabajo de los operarios que trabajan allí. "Las dosis [de radiación] que podrían recibir pueden ser potencialmente letales en un breve periodo de tiempo".
Es complicado imaginarse la pesadilla dentro de la planta. El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha difundido en su Facebook una nota con el balance de heridos hasta ahora. Entre los 23 lesionados se incluyen huesos rotos, afectados por las diversas explosiones de los reactores... Hay además una veintena de afectados por distintos grados de radiación; entre ellos, bomberos y policías. El cuadro parece preocupante para la salud de los ya conocidos como "valientes de Fukushima".
EE UU ha pedido a sus ciudadanos que viven a menos de 80 kilómetros de la central que abandonen el área o eviten salir de casa; mientras, Reino Unidos, siguiendo el ejemplo de Francia, ha informado a sus nacionales de que deben plantearse la posibilidad de irse de Tokio, a 240 kilómetros de la planta de Fukushima I.
Aunque hoy el Organismo Internacional de Energía Atómica ha confirmado que los núcleos de los reactores 1, 2 y 3 de la central están dañados; la principal fuente de radiaciones ahora mismo está en el reactor 4, cuya piscina de residuos ha experimentado una bajada en el nivel de agua dejando al aire las barras de combustible usado, que son más radiactivas que cuando están en funcionamiento. En el momento en que las barras se reemplazan por unas nuevas, las viejas son depositadas en una pileta y cubiertas de agua, que circula por un circuito cerrado para refrigerar las barras. La NISA había informado previamente que se estaba preparando la inyección de agua tanto en esa piscina como en la del reactor 3, cuyo nivel de agua también ha descendido.
Sin embargo, siempre de acuerdo con la Comisión de Regulación Nuclear estadounidense, la subida de radiación podría dificultar los trabajos necesarios para recuperar el control en ese edificio, seriamente dañado por los dos fuegos que se han producido en los últimos días. La subida de los niveles de radiactividad ya provocó la pasada noche una evacuación durante unas horas de los trabajadores que quedaban en la central. Eran medio centenar de personas, ya que la mayoría de los 800 que en principio estaban, habían sido evacuados un día antes tras el empeoramiento de la situación. Tras unas horas con la central vacía, 180 operarios volvieron a Fukushima en un nuevo esfuerzo para refrigerar los reactores y las piscinas de combustible usado de la central. En los últimos días se ha intentado incluso con helicópteros, pero la operación ha tenido que ser abortada por los altos índices de radiactividad. No obstante, el Gobierno nipón mantiene la zona de evacuación en 20 kilómetros a la redonda de la planta y sostiene que los niveles radiactivos detectados no son perjudiciales para la salud.
A los graves problemas que presentan ya cuatro reactores, se suma la subida de la temperatura de las piscinas de los reactores 5 y 6, que están siendo refrigerados con ácido bórico y agua de mar. Estos dos, igual que el número 4, estaban desconectados para su revisión antes de que ocurriera el terremoto, pero pese a ello se han visto afectados por la rotura de los sistemas de refrigeración que provocó el tsunami. Nadie sabe dónde acabará la crisis de Fukushima.
Visita del OIEA
El director del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), el japonés Yukiya Amano, dijo anoche lo que su Gobierno callaba: el núcleo de tres de los seis reactores de la central siniestrada por el terremoto del pasado viernes están dañados, lo que facilita una fuga masiva radiactiva. El emperador Akihito, en un hecho sin precedentes, dirigió un mensaje televisado a la nación en el que pidió solidaridad y unidad ante los difíciles tiempos que aguardan a Japón.
Amano, que ha criticado al Ejecutivo de Naoto Kan por no suministrar una información clara y completa de los daños causados en la central por el seísmo de magnitud 9 en la escala Richter y el tsunami con olas de hasta 10 metros, anunció que viajaría hoy a Tokio para contrastar los datos y ofrecer toda la ayuda del OIEA para hacer frente a la gigantesca crisis que comienza a desatarse. "La situación es muy grave", afirmó Amano. "Hemos confirmado el daño en el núcleo de tres reactores", dijo a France Presse.
"Espero, sinceramente, que uniendo esfuerzos podamos impedir que la situación empeore", declaró el emperador, de 77 años, después de tratar de preparar a su pueblo para más desgracias de las vistas estos aciagos días.
Ayuda de EE UU
Estados Unidos tiene dos expertos sobre el terreno que tienen como misión informar a la embajada estadounidense sobre el desarrollo de los acontecimientos dentro de un equipo de la Agencia Internacional estadounidense para el Desarrollo (USAID).
Además de pedir precaución a sus ciudadanos que vivan a menos de 80 kilómetros de la central, el Pentágono ha anunciado la prohibición a todo su personal de entrar en esa área sin una autorización especial. Puesto que el Ejército estadounidense participa en las labores de emergencia, también ha anunciado que administrará tabletas de yoduro de potasio como medida preventiva a sus tripulaciones aéreas, un elemento encaminado a reducir el riesgo de las partículas radiactivas sobre la glándula tiroides.
En rueda de prensa en la Casa Blanca, Jaczko ha informado de que la NRC ha respondido a la petición de ayuda del Gobierno japonés para enfriar los reactores nucleares. "Es una situación seria y seguiremos aportando toda la asistencia que se nos pida", declaró Jaczko.
Tanto Jackzo como el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, han reiterado que pese a lo ocurrido en Japón, el Gobierno no variar su política de apoyo a la energía nuclear, uno de los pilares de la estrategia energética del presidente Barack Obama para reducir la dependencia del petróleo extranjero.
La de ayer fue una jornada sin respiro, en la que la situación de la central se fue complicando minuto a minuto mucho antes de que amaneciera: primero, el incendio apagado el día anterior en el reactor número 4 se reactivó mientras la atención estaba centrada en el número 3, en el que ya se habían detectado fallos en la contención que lo recubre, según reconoció en una conferencia de prensa el ministro portavoz Yukio Edano.
Sin embargo, fue el escape radiactivo del reactor número 2 el que obligó a la compañía propietaria de la central, Tepco, a desalojar a los 50 operarios que se habían quedado en el infierno para tratar de impedir que se desencadenara la peor catástrofe del planeta. En esas circunstancias, "los trabajadores no podían realizar el más mínimo trabajo en la planta", dijo Edano.
Contra todo pronóstico y después de que fracasaran los intentos de lanzar agua con ácido bórico desde un helicóptero que trató inútilmente de acercarse al humeante reactor, la radiactividad se redujo a media mañana y los héroes pudieron volver al tajo. Esta vez, no han sido 50 sino 180 los operarios que han aceptado arriesgar sus vidas para tratar de salvar muchas más.
Pero tras la angustia por la enorme cantidad de muertos y heridos que han provocado el terremoto y el tsunami ?ayer el Gobierno reconoció que hay más de 12.000 muertos y desaparecidos?, los japoneses comienzan a dar signos evidentes de inquietud ante la desastrosa política informativa del Gobierno. Ya no les vale el llamamiento a la calma del primer ministro. Las aglomeraciones en las estaciones de tren y autobuses de Niigata revelan que se ha iniciado un éxodo masivo hacia el sur.
Niigata, capital de la provincia del mismo nombre vecina a Fukushima, es la principal ciudad del noroeste de Japón y la última a la que llega el shinkansen (el tren bala). Aquí vienen a embarcarse hacia el sur los que huyen del noreste, cuyas costas sufrieron el seísmo, el tsunami y en las que se encuentran las dos centrales de Fukushima y otras dos que también han tenido problemas, aunque menores.
Según el OIEA, todo apunta a que los núcleos de los reactores 1, 2 y 3 están dañados y pueden haberse fundido, al menos parcialmente, mientras que el problema del 3 y el 4 afecta a las piscinas en las que se encuentran las barras de combustible utilizado. En ambos casos se libera una enorme cantidad de radiactividad.
El Gobierno evacuó a los habitantes en un radio de 20 kilómetros pero a los que se residen entre los 20 y los 30 kilómetros, solo les ha pedido que mantengan ventanas y puertas de sus casas cerradas y que salgan a la calle lo menos posible. Yuhei Sato, gobernador de la provincia de Fukushima, criticó duramente al Gobierno por su política de evacuación.
Más de 500.000 personas han sido trasladadas a escuelas y edificios públicos, muchos de ellos sin agua, ni calefacción, ni luz, ni gas. La intensa nevada caída ayer en todo el norte agravó la situación tanto de los evacuados como de los cientos de equipos de rescate que rastrean el fango y los escombros en búsqueda de algún milagro y de los cuerpos de los miles de desaparecidos.
Consulta en este cuadro el último informe de la Agencia Japonesa de la Energía Atómica (PDF).