Adele, Manel, James Blake y Britney Spears, protagonistas musicales de 2011.
- CLARA HDEZ. 15.12.2011 – 08.24h/@clarittis
Inesperados regresos musicales. Triunfos de ventas o grandes fiascos; los más criticados por los expertos y los más venerados… esta es una selección de veinte de los discos que protagonizaron la actualidad musical del año 2011.
Adele) A principios de 2011 esta británica era prácticamente una desconocida en España. Pero entonces lanzó 21. Primero, el CD hizo sombra al nuevo de Liam Gallagher; después, al de Jessie J. Ahora, con su voz poderosa con un punto de desgarro, ha desbancado a Amy Winehouse como la autora del disco más vendedor en lo que va de siglo.
Manel) Nada más salir al mercado el álbum de la banda barcelonesa consiguió algo fuera de lo común: escalar al número 1 de la lista de éxitos española con temas interpretados íntegramente en catalán. Hasta ahora solo artistas como Joan Manuel Serrat o Lluís Llach habían logrado algo así.
The Drums). Este segundo álbum ha supuesto la consolidación de The Drums, grupo estadounidense que suena a unos The Smiths renovados. Ninguna revista musical se ha resistido a entrevistar a su enigmático y sombrío solista, Jonny Pierce, y el festival Primavera Sound ha anunciado su fichaje como una de las grandes bazas del cartel.
Pablo Alborán) Como le ocurrió a Justin Bieber, el éxito de este malagueño se gestó en las redes sociales, donde colgaba sus canciones. La publicación de su debut en marzo fue celebrada por un flamante número 1 en iTunes. Desde entonces, no ha abandonado los primeros puestos de ventas y algunos le señalan como ‘el nuevo Alejandro Sanz’.
Björk). Si el 21 de Adele no podía faltar en esta lista por su éxito arrollador, el de Björk era otro candidato obligado, aunque en su caso, por su afán experimental. Biophilia rebasa el concepto de mero álbum y lo convierte en un proyecto multimedia que explora las posibilidades musicales del iPad. Incluye apps y nuevos instrumentos como el harpsichord.
Fleet Foxes). Su nombre aparece en la mayoría de las listas de los mejores discos de 2011 realizadas por los medios internacionales, desde The Guardian o Uncut a MTV News y Stereogum. Su secreto: un neofolk placentero capaz de alcanzar a oídos variopintos. Algunos han definido sus canciones como ‘irreprimiblemente preciosas”.
Amaral). Es uno de los grupos más vendedores y respetados de España. Por eso, los tres años que ha tardado en lanzar nuevo disco se han hecho largos. Su regreso se adscribe, como es habitual, al pop rock de melodías, si bien la solemnidad y dureza de su primer ‘single’ ha dejado un tanto confusa a su parroquia. Los hay que hablan de consistencia, y los que hablan de decepción.
Kanye West y Jay-Z). Excesivo, pomposo, narcisista… eso y más es Kanye West, el rapero de lujo que posa con pajarita en las reportajes y es considerado un salvador (comercial) del hip hop. Su alianza con Jay-Z resulta fructuosa: es audaz, innovadora, profunda… y recargada. Un ejercicio de magnificiencia.
Sergio Dalma). En España es Sergio Dalma, y no Michael Jackson, el ‘rey del pop’, bromeaba un reportero hace unos meses. Y es cierto: el español de voz italiana no tiene rival en cuanto a cifras de ventas. Todo ello a pesar de que su propuesta -la revisión de las baladas románticas más populares del cancionero italiano- no es especialmente innovadora y alcanza solo de soslayo al público más joven.
Coldplay). No importa que el grupo comandada por Chris Martin haya decidido evitar Spotify y no subir a esa plataforma sus nuevos temas: canciones como Paradise o Charlie Brown cosechan miles y emocionados clics en otros portales de Internet mientras Coldplay recibe la consideración de ‘gran banda’, elevada al olimpo del pop rock.
Vetusta Morla). Su primer álbum les convirtió en 2008 en el grupo revelación del pop rock español. Ahora, con el segundo, debían demostrar que aquello no había sido una moda pasajera. Su más que digno ‘Mapas’ ha traquilizado a sus fans, a la crítica y les ha garantizado una nueva gira de conciertos llena de éxitos.
Lady Gaga). No es fácil enfrentarse a un nuevo álbum tras haber sido responsable de éxitos llenapistas como Bad romance y ser la nueva diva del disco pop. Para los más severos, el nuevo CD de Lady Gaga es uno de los fiascos de 2011. Sin embargo, la cantante se ajusta con fluidez al género con el que triunfó dos años antes. Quizá su fórmula acusa el paso del tiempo y la ausencia de sorpresas, pero algunos singles suenan vibrantes.
James Blake). Su reino se encuadra en los confines del dubstep, ese género que marca desde hace unos años los pasos de la modernidad en Europa. Tras varios EP, el de Deptford ha firmado por fin un larga duración profundo, íntimo y evocador. Canciones “normales”, explica el propio Blake, pero ejecutadas de forma innovadora. Y cool, muy cool.
Britney Spears). Habían pasado tres largos años desde que la princesa del pop grabara nuevos temas y una legión de Lady Gagas, Katy Perrys y Keshas parecían haber ocupado su lugar. Sin embargo, Britney resucitó en 2011 para convertirse, de repente, en musa de la prensa indie. Los expertos de esos medios aseguran que, en su dance pop, se ocultan pinceladas de dubstep. Y eso es lo más.
Extremoduro). Fue el grupo de rock más imitado en España durante los años 90. Dos décadas después sigue demostrando-aunque cada vez con más esfuerzo- que son los amos de esa escuela que combina rudeza y poesía. En esta ocasión sólo han logrado grabar seis temas -más armoniosos y templados que en producciones anteriores- y han rechazado hacer promoción o ir de gira.
Bon Iver). Uno de esos nombres que han pululado durante todo el año por las páginas de las revistas especializadas arrancando alabanzas y confirmando el regreso de una escena de cantautores de canciones de pop folk hermosas y cabizbajas. Los arreglos y el falsete consiguen que el resultado suene a espiritual modernidad.
Pitbull). Su Planet Pit figura en algunas de las listas de lo peor del año recién publicadas. Es lo que tiene ser un hacedor de hits multitudinaro -y millonario- que no rechaza añadir a sus temas cucharaditas de géneros denostados como el reggaeton para hacerlos aún más bailables. Para menearse… y no parar.
Foo Fighters). El séptimo disco de la banda comandada por Dave Grohl constituye una vuelta al rock de estadio y, según sus componentes, su “trabajo más heavy hasta la fecha”. Crítica y seguidores han aplaudido este Wasting light acudiendo en masa a sus conciertos y señalándolo como uno de los mejores trabajos de la formación.
Ximena Sariñana). El pop indie elaborado en Latinoamérica comienza a hacer mucho ruido. Primero fue la chilena Javiera Mena quien protagonizó portadas y shows en España. Ahora es la mexicana Ximena Sariñana la que alecciona sobre la ‘onda’ alternativa que se hace más allá del charco. Canta en inglés y ya cuenta con una amplia legión de fans europeos.
Amy Winehouse). El trabajo póstumo de la diva del nuevo soul, fallecida el pasado verano, es el resultado de un arduo trabajo por parte de su sello y productores, que se han desvivido por tenerlo listo para las lucrativas fechas navideñas. Pese a carecer de la profundidad de Back to black, el CD pasa la prueba y es número 1 en Gran Bretaña.