domingo, 29 de abril de 2012

JULIO MARTINEZ POZO! Ve Gallup-Hoy ha dado el zarpazo final cualquier posibilidad de engañar a los electores por parte del PRD

El juego habló
Escrito por: Julio Martínez Pozo (eltribunaldelatarde@yahoo.com)
Tomado de El Nacional.

Un dato de la encuesta Gallup-Hoy, de agosto del 2011, prevenía a los perredeístas contra celebraciones anticipadas, pese a que su candidato exhibía una ventaja de 14.5%, sobre el candidato del PLD (47.9 HM 33.4 DM),13.7 de los que en esos momentos votaban por Hipólito eran peledeístas.

¿Qué iba a pasar cuando el PLD desarrollara una jornada de fidelización de sus votantes? Que la ventaja de Hipólito se desvanecería, y el cuadro apuntaría hacia la situación en la que permaneció unos meses atrás, en la del empate estadístico. Pero una vez que el PLD se reconciliara con sus votantes, ¿cuál era el paso siguiente? Procurarse a los indecisos y mermar el voto duro del adversario.

Dando por un hecho que Hipólito Mejía se emplearía en procurar la unidad de su partido, la militancia de la organización le adelantaba el respaldo de un 90%, mientras Danilo tenía el de un 73% de los suyos, pero como Mejía se entendía ganado, jugó a que la unidad llegara por ósmosis, mientras Danilo, antes de poner un pie en la calle, se empleó, con el apoyo invaluable de Leonel Fernández, a poner todos los sentimientos del PLD en un solo propósito.

Tiene a todo su PLD, mientras Hipólito no tiene a todo su PRD y los indecisos le están llegando en camada arrastrados por dos factores: sus propuestas, y los errores de Hipólito y sus allegados, que están convenciendo a todos los que tenían dudas de la grave amenaza que él representa para la estabilidad de la economía y la institucionalidad democrática.

Dos prendas de esta semana, se unen a las anteriores, para proyectarlo como el candidato que en más dislates ha incurrido en una campaña electoral. Si es presidente destituirá, sin tener facultad para ello, a varios miembros de la Suprema Corte de Justicia a los que ha tachado de pelafustanes y sinvergüenzas, y otro lado, se mete en problemas con las domésticas, diciendo que son ladronas, porque toman los filetes de las neveras para sus novios.

Y si los escándalos sobre una presunta trama para derrocar al presidente haitiano, o sobre las intenciones de propinarle un tiro al presidente del PRD, no fueran lo suficientemente estremecedores, se producen las declaraciones de uno de los personeros que le apoyan, hablando de sus intenciones de reventar adversarios.

Eso explica la evolución ascendente que ha marcado Danilo en Gallup y en otras encuestas, que de 33.4 en agosto sube a 42.6 en noviembre, y a 48.7 en marzo 2012 y 50.6 en abril; mientras la de Hipólito ha sido primero de estancamiento y luego de descenso.

Su rechazo, sin embargo, no deja de crecer. En Gallup-Hoy de noviembre de 2011 39,8 dijeron que nunca votarían por él, lo que se ha elevado en la entrega de abril 2012 a un 41,7, en cambio la de Danilo disminuyó de 28,8 a 26,4.

Gallup le ha dado el zarpazo final a cualquier posibilidad de engañar a los electores, que ya no discuten que el próximo presidente será Danilo, sino el margen con el que ganará, que de seis en adelante hay distintas versiones, pero que nadie se duerma, que se requiere que sea amplio para ahorrar trastornos.