lunes, 21 de mayo de 2012

EXPLICACIONES CONFUSAS ANTE LO EVIDENTE! Hipólito inició su campaña en mayo de 2011 con un 47.9%, y terminó el 20 de mayo de 2012 con 46.96%

EXPLICACIONES CONFUSAS ANTE LO EVIDENTE.
Hipólito inició su campaña en mayo de 2011 con un 47.9%, y terminó el 20 de mayo de 2012 con 46.96%.
Candidato presidencial del PRD no pudo prender para alcanzar un porcentaje superior al que inició en mayo del 2011, según la encuesta Gallup-Hoy publicada en ese mes.

Por Mayobanex De Jesús Laurens.
Uso de recursos del Estado, compras de cédulas, abuso de poder, dislocamiento de actas y otras formas de denuncias como pataleo es lo que se escucha y se escribirá sobre la derrota electoral sufrida por el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en las pasadas elecciones del 20 de mayo de 2012.

Contraviniendo a los postulados de las ciencias políticas y las máximas de los "clasicos", ahora se pone como argumento válido la tesis del uso de los recursos del Estado para justificar una derrota que tiene varias causas que deben buscarse a lo interno del PRD.

En las elecciones congresuales y municipales del 2010 el principal partido de la oposición obtuvo algo más del 46%, bajo la dirección y liderazgo de Miguel Vargas Maldonado. A dos años de ese proceso, Hipólito Mejía, quien fuera el candidato presidencial del principal partido opositor, inició su campaña proselitista en mayo de 2011 con un 47.9%, obteniendo el 20 de mayo de 2012 un 46.96% en las elecciones presidenciales.

La candidatura de Hipólito Mejía inició con el porcentaje que le entregó Miguel Vargas Maldonado en el 2010, y no le agregó ni un punto adicional.

El expresidente Mejía no impactó, no gustó, no tuvo atractivo ni aliciente que motivara a los nuevos votantes, a las mujeres y la llamada masa silente, para que le endosaran sus adhesiones.

La alta cúpula del PRD es la única culpable de la derrota de ese partido. Escogieron al peor candidato. Conocían sus debilidades. Sabían que era vulnerable. Atajaron al que tenía condiciones para llevar esa organización política al poder.

Ahora solo les quedan las lamentaciones y las lágrimas de sangre por los errores que cometieron.