martes, 9 de octubre de 2012

Se demora el salto más alto de la historia

El paracaidista y atleta Felix Baumgartner intentará romper la barrera del sonido, pero el clima demora su partida. Planea brincar desde una cápsula elevada a 37 kilómetros

Según el reporte de la web que emite en vivo el intento de Baumgartner el lanzamiento del globo que lo depositará a una altura jamás alcanzada por un hombre para lanzarse hacia la tierra, el clima reinante obligó a posponer el despegue al menos hasta las 11:00 GMT.

Félix Baumgartner ascenderá unos 39.000 metros en una cápsula que será llevada hasta el borde de la estratósfera por un globo de helio gigante, para luego lanzarse en caída libre hacia tierra vistiendo un traje presurizado. El salto estaba previsto inicialmente para el lunes por la mañana, pero debió retrasarse 24 horas debido al mal tiempo.

Baumgartner, de 43 años, ha estado entrenando durante cinco años para el salto, que supondrá un descenso en caída libre durante unos cinco minutos antes de la apertura de un paracaídas a 5.000 metros de altura que lo depositará en el suelo.

El mayor riesgo que enfrenta es la posibilidad de girar fuera de control, lo que podría ejercer las fuerzas G y hacerle perder el conocimiento; por eso, es esencial que controle el salto desde la cápsula, para lo cual se deberá colocar en una posición con la cabeza hacia abajo para aumentar la velocidad.

“En una misión como esta, uno tiene que estar mentalmente en forma y tener un control total de lo que hace, y me estoy preparando muy a fondo”, dijo Baumgartner, quien usará un traje espacial presurizado y llevará tanques de oxígeno para poder respirar mejor.

Baumgartner espera marcar una serie de récords: ser el primer hombre en romper la barrera del sonido, a unos 690 kilómetros por hora; dar el salto más alto de la historia (a más de tres veces la altura media de crucero de un avión) y registrar la mayor velocidad en caída libre.

La misión, denominada Red Bull Stratos y respaldada por un equipo de 100 expertos en el lugar de lanzamiento en Roswell, Nuevo México, espera que la hazaña contribuya también a la investigación médica y aeronáutica.

“Vamos a establecer nuevos estándares para la aviación. Nunca antes una persona llegó a la velocidad del sonido sin estar en un avión”, dijo el director médico Jonathan Clark, doctor de la tripulación de seis vuelos del transbordador espacial.

La misión pondrá a prueba “nuevos equipos y el desarrollo de procedimientos para habitar en altitudes elevadas y soportar una aceleración tan extrema”, de manera de mejorar la seguridad de los astronautas, pero también de potenciales turistas espaciales, agregó.

La cápsula espacial que transportará a Baumgartner hasta los confines de la estratósfera será llevada por un gigantesco globo de helio -más alto que la Torre Eiffel cuando esté completamente inflado- alrededor de las 06H00 del martes (12H00 GMT).

Según lo previsto, el ascenso tomará de dos a tres horas. El descenso, si todo va bien, durará unos 15 a 20 minutos, unos cinco minutos en caída libre y otros 10 a 15 en el paracaídas. Se espera que el aterrizaje sea suave.

El vuelo será transmitido en vivo en el sitio web de la misión con más de 35 cámaras en el suelo y en el aire, incluyendo en el traje de Baumgartner.

En el equipo de la misión está el coronel retirado de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, Joseph Kittinger, quien detenta tres de los récords que Baumgartner intentará romper, entre ellos el actual salto récord desde 31.333 metros, establecido hace más de 50 años en 1960.

En ese momento nadie sabía si un ser humano podría sobrevivir a un salto así. “El ser humano es siempre muy curioso, siempre quiere ir más rápido, más alto, más bajo, más profundo, eso es parte del desafío de los seres humanos. Siempre nos gusta superar los límites”, dijo el lunes Kittinger, de 83 años, antes del salto del austriaco.