ACTITUD DE ESTADISTA QUE SORPRENDE!
Danilo Medina ha logrado reunir a todos los sectores de la vida nacional, escuchó sus reclamos sobre la reforma fiscal, acogió sugerencias y dispuso cambios en las figuras impositivas.
Redacción Diario Digital Barahona
Ya lo había expresado en sus discursos de campaña, cuando manifestaba que no era un improvisado y que tenía un plan bien concebido, a la vez que afrimaba que sabía lo que tenía que hacer para lograr una buena gestión de gobierno.
Danilo Medina inició como lo hace un estadista. Primero organizó la casa y puso las cosas en orden. Aplicó de inmediato un plan de austeridad a todos los niveles, mientras hacía un levantamiento de informaciones del estado de la economía nacional, los compromisos de deuda pública y los cálculos de ingresos requeridos para poder hacer frente a las demandas de educación, salud y los demás ministerios del gobierno.
Entendiendo que vivimos en un mundo globalizado, guiados por las superpotencias económicas, tuvo bien claro que había que mantener las relaciones con el Fondo Monetario Internacional, y desde la base de un acuerdo poder llegar a los demás organismos financieros internacionales, como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo, entre otros.
A sabiendas que para impulsar un vasto plan de obras e iniciativas, que puedan hacer cumplir sus promesas de campaña, se abocó a someter al escrutinio de la población la formulación de una reforma fiscal, buscando con ella poder obtener los recursos necesarios para enfrentar los desafíos financieros a que estará sometida la economía nacional y a la vez poder cumplir con su plataforma de gobierno.
Está a la espera de que la reforma fiscal pueda ser aprobada en el Congreso para su aplicación en enero del 2013, y a la vez elaborar el presupuesto de ingresos y gastos de ese mismo año, para luego ir por el acuerdo con el FMI.
De una cosa podemos estar seguros, Danilo Medina manejará el presupuesto de la nación de forma austera, priorizará las inversiones, mejorará la calidad del gasto y pondrá en ejecución planes sociales que irán en beneficio de la población.
Más que temer por una reforma fiscal, debemos de darle la oportunidad al alctual presidente de la nación de poder manejar una mayor cantidad de recursos, que ayudarán a dinamizar la economía con una administración honesta y transparente.