Barahona, capital de los paisajes costeros nacionales.
Por Virgilio Gautreaux P.
Indudablente que recorrer el litoral costero barahonero es un masaje espiritual. Es un llamado la paz, la concordia y a la confraternidad. Tan pronto nos sumergimos en esta olimpíada visual, desaparecen las angustias, la sed y sólo contemplar los contrates multicolores del aire, el mar y la tierra, nos embraga.
Ver la costa de La Ciénaga desde lo alto de la Avenida Enriquillo es todo un espectáculo. Esta pujante comunidad es asiento en lo alto de sus montañas, de lugares inimaginables con buenas temperaturas y de una riqueza ecoturística de primer orden.
Indudablente que recorrer el litoral costero barahonero es un masaje espiritual. Es un llamado la paz, la concordia y a la confraternidad. Tan pronto nos sumergimos en esta olimpíada visual, desaparecen las angustias, la sed y sólo contemplar los contrates multicolores del aire, el mar y la tierra, nos embraga.
Ver la costa de La Ciénaga desde lo alto de la Avenida Enriquillo es todo un espectáculo. Esta pujante comunidad es asiento en lo alto de sus montañas, de lugares inimaginables con buenas temperaturas y de una riqueza ecoturística de primer orden.


De la contemplación de las múltiples bellezas que tenemos, no se come. Nuestros hombres para subsistir, deben tirarse al mar en búsqueda del sustento de sus familias. Para nuestra fortuna, pudimos comprar este carite acabadito de pescar.

Nuestro mar de diferentes tonalidades de azul, verde y larimar, es una excelente oportunidad para diferentes deportes acuáticos, paseos de superficie y submarinos. Islotes, peñascos y arrecifes coralinos, son asiento de cadenas alimenticias que atraen diferentes especies y peces multicolores dejan admirados a los fotógrafos marinos que nos visitan.

Los vientos y la impetuosidad del oleaje en muchas partes de nuestras costas, constituyen una plataforma de primer orden para el montaje de espectáculos deportivos. Esta oportunidad aún virgen, hay que aprovecharla.






La “crónica roja” concentrada en hechos trágicos, debe reducirse en nuestros medios de comunicación locales. No es posible que cuando abrimos ciertos periódicos, sólo veamos atracos, asesinatos, accidentes mortales y tragedias personales.

Algunos manejadores de medios deben entender que la Policía Nacional y los hospitales, no son las únicas fuentes disponibles para presentar lo que acontece en Barahona. Sangrientas fotos, dibujos grotescos, vehículos accidentados y cadáveres destrozados, proyectan una imagen terrorífica de nuestra querida provincia.

Lo que ocurre en nuestra demarcación se presenta en otras partes de la República Dominicana, pero sólo lo de Barahona sobresale. Con esto no pretendemos que sólo se hable bonito y de castillitos en el aire. Somos una realidad dominicana con sus buenas y sus malas. Numerosos portales provinciales no se ocupan de reseñar tragedias y son muy visitados.


Continuando mi recorrido turi-fotográfico al llegar a Bahoruco, debemos confesar que el espectáculo costero nos sorprendió. Más nos sorprende que otros lugares del país casi iguales (no mejores) tengan grandes inversiones, mientras que al referirse a esta playa, solo la mencionen en semana santa como un lugar extremadamente peligroso
!!!!!!!!Areas de nuestro mar “picado” y con buena brisa, divierten y estimulan deportes acuáticos, de vela y otras disciplinas. Recorrer la costa en veleros y botes desde la ciudad de Barahona hasta Enriquillo, es emocionante. Transitar en Jet-Sky en El Cayo, frente a los hoteles de la ciudad y llegar a Palito Seco, bordeando los mangles, es emocionante.
Esquiar, surfear y practicar Wind-Surfing, Kite-Boarding y Sky-Surfing, tienen gran potencial en todo nuestro litoral. Juan Esteban, El Arroyo, Baoruco, La Ciénaga, Paraíso, Ojeda, Los Patos, Caletón y Enriquillo, son lugares con excelentes condiciones para estos deportes.San Rafael sigue admirando a quienes lo visitan. La ingeniosidad y laboriosidad de sus habitantes, ha logrado incrementar la oferta de balnearios, a partir de su maravilloso río. Casetas estratégicamente ubicadas en ambos márgenes, se ocupan de servir a los visitantes un variado menú integrado por pescado frito, lambí y camarones guisados, acompañado de moro con coco o tostones. Por doquier mesas cargadas de bollitos de yuca, quipes y hojuelas, aseguran que uno se sienta bien y aprecie mejor las maravillas que ofrece la naturaleza.Enriquillo-haciendo honor al glorioso cacique-está enclavado en una pequeña estribación montañosa. Los relieves urbanos de esta comunidad son hermosos y permiten desde casi todos los ángulos, apreciar la belleza costera. Su playa rebelde es uno de sus atractivos más puntuales. La brisa contínua, permite soportar aceptablemente los rayos solares que tanta luminosidad proyectanEmpresarios barahoneros poseen en estas zonas excelentes infraestructuras para recibir turistas que desean interactuar ambientalmente con las riquezas bióticas que ofertan el litoral costero y las ubérrimas montañas. Mediante jornadas de educación ecológicas y caminatas, los visitantes disfrutan la diversidad de atractivos que nuestro medio natural ofrece.
Contemplar la “Loma del Curro” a la distancia, sigue siendo un bello espectáculo. Desde esta perspectiva, la montaña parece dormida, descansando entre las palmeras.
Así es Barahona !!!!!!!!
La variada oferta paisajística barahonera se complementa con lugares tranquilos, propios para la meditación y el descanso. Un relajante escenario es bueno para escribir, celebrar encuentros y realizar jornadas de capacitación. Nada mejor que aprender cosa nuevas, mientras a lo lejos un rítmico oleaje nos hace olvidar la turbulencia urbana.
Nuevamente San Rafael nos atrapa con sus invisibles, pero fuertes lazos. No hay forma de sustraerse de sus encantos. El agua “durce y la salá” son de disfrute obligado. A ritmo de Bachata y Merengue de los 80, los visitantes se resisten a marcharse del lugar.
Mejores infraestructuras, instalaciones sanitarias adecuadas y baños decentes, se requieren urgentemente. Las autoridades municipales deben controlar y mejorar las condiciones. Una cuota por estacionarse financiaría la limpieza, el orden y la seguridad de los bañistas, incluyendo servicio de salvavidas.