Un desbordamiento de maldades contra un ser humano que condujo a un objetivo de dos para una parte. Ahora un equipo se impone sobre el otro en el máximo organismo de dirección del partido oficial en esta provincia.
Redacción Diario Digital Barahona.
BARAHONA.-Se produjo contra esa persona toda una andanada de perversidades, trayendo a esta provincia en varias ocasiones al máximo representante de un equipo, que por demás es el principal al frente de los asuntos organizativos de la entidad partidaria oficialista.
Se hicieron reuniones, encuentros. Se señaló claramente lo que se quería contra él. Había que no solo impedirle de participar, sino además desterrarlo, para que no pudieran quedar siquiera vestigios de su persona en esta provincia.
Llegó la plenaria del pasado 24 de noviembre, se llevó al centro olímpico de Santo Domingo a los presidentes de intermedios con varias líneas a seguir, pero la primera era: votar a favor de los 10 años de membresía para estar en el máximo organismo de dirección del partido morado.
El primer mandatario hizo un llamado al vapuleado, bombardeado y calumniado dirigente peledeísta, para informarle que dejara el activismo, que él lo iba a proponer en la cuota que le correspondía, un total privilegio por tratarse de ser el presidente de la República.
El simplemente quería ser miembro de un organismo de dirección peledeísta para representar a Barahona y contribuir con el afianzamiento, unidad y desarrollo de esa organización política a nivel local. Se alegó de todo contra esa persona, inclusive acusándolo de lo que muchos de ellos han hecho en toda la vida partidaria en Barahona.
Hoy resultó ser un dos por uno. El equipo que él representa ganó la única plaza expuesta en el congreso elector por esta provincia, y ahora Danilo lo escoge para representar al comité central, lógicamente que será por Barahona, aunque sea en la cuota nacional.
Ahora se presenta un giro a favor del equipo del ámbito en que él está. De un lado, José, Pedro, Carlos, Alfredo y Ñiñín. Del otro, Eddy, Noris, Mariano y Gerineldo. Ismael se mantiene neutral, aunque ha expresado abiertamente ser un hombre identificado con Danilo Medina y sus ejecutorias gubernamentales.
Definitivamente, es bíblico y es una máxima de la Divina Providencia: "Quien mal obra, mal termina".
Las acciones contra José del Castillo Saviñón, resultaron de "dos por uno".