Redacción/BBC Mundo/Tomado de BBC Mundo
Arzobispo Óscar Romero
Óscar Romero era conocido como “la voz de los sin voz”.
El Papa Francisco anunció que suspendió la prohibición para beatificar al arzobispo salvadoreño Óscar Arnulfo Romero.
El religioso salvadoreño murió
baleado por un francotirador asociado a los escuadrones de la muerte de
la extrema derecha en ese país, mientras oficiaba una misa en la capilla
del hospital para enfermos de cáncer Divina Providencia, en San
Salvador,el 24 de marzo de 1980.
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El arzobispo es recordado por
denunciar las injusticias cometidas en los años previos al conflicto
armado entre el ejército y la guerrilla que sufrió El Salvador durante
doce años (1980-1992), y que dejó un saldo de 75.000 personas muertas,
8.000 desaparecidos y 12.000 lisiados.
Fue un ferviente defensor de la
Teología de la Liberación, una interpretación de la fe cristiana desde
la perspectiva de los pobres, y fue conocido como “la voz de los sin
voz” por su permanente defensa de los más desprotegidos.
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Una beatificación bloqueada
La beatificación de Romero había
sido obstaculizada durante décadas por el Vaticano, debido a
preocupaciones sobre las supuestas inclinaciones marxistas del
sacerdote.
Estatua Óscar Romero, Los Angeles
La estatua del arzobispo Romero en Los Angeles acompaña una vigilia contra la violencia en Centroamérica el 6 de agosto de 2014.
La figura del arzobispo Óscar
Romero se ha consolidado como un símbolo de los derechos de las víctimas
de la violencia en el mundo.
En 2011, el presidente de
Estados Unidos, Barack Obama, visitó el sepulcro del arzobispo Romero en
la catedral de San Salvador, acompañado del entonces presidente
salvadoreño, Mauricio Funes.
Y en 2013, salvadoreños y
extranjeros salieron por las principales calles de la capital
salvadoreña para conmemorar los 33 años de la muerte del arzobispo.
El Papa Francisco aseguró que confía que el proceso de beatificación ocurra con celeridad.