Por Ramón Núñez Ramírez
r.nunez[@]hoy.com.do/Tomado de Hoy.com.do
Una
de las características que ha definido las administraciones del PLD ha
sido por un lado el aumento sostenido en el gasto social, la inversión
en infraestructuras, la modernización del Estado, y por otro lado el
compromiso con la estabilidad y el crecimiento, en contraposición al
hecho de que cada vez que los opositores han asumido el poder han
conducido al país a la recesión y la pérdida de la estabilidad.
No hay que remontarse tan lejos como la década de los ochenta, donde
gobernó el PRD, cuando el país comenzó a declinar en términos
económicos, aumentó el endeudamiento externo, hasta que finalmente la
nación se vio obligada a someterse a graves ajustes dictados por el FMI,
devaluación, alzas de precios y hasta una poblada en protesta por las
alzas, la cual fue sofocada a fuego y sangre.
Tampoco es necesario abundar sobre la crisis de 1990-91, en el gobierno
del Dr. Balaguer, con una hiperinflación, escasez de una serie de
productos, apagones y un choque externo por la crisis petrolera.
Es innecesario recordar todo lo que paso en este país en 2003 y 2004,
donde quiebras bancarias fraudulentas, pesimamente manejadas por las
autoridades del tercer gobierno del PRD, condujeron a otra
hiperinflación, disparo del tipo de cambio hasta 55×1, creación de más
de un millón de pobres y aumento del desempleo.
Por el contrario en las administraciones del PLD el compromiso con la
estabilidad ha sido firme y por ello los agentes económicos confían en
que no hay riesgos de crisis económicas y por eso crece sostenidamente
la inversión.
En la primera administración del PLD del Dr. Leonel Fernández, el
crecimiento promedio del PIB fue de 6.9% y la inflación promedio de
7.4%, mientras la inversión extranjera directa dio un salto de US$96.5
millones en 1996 a US$952.9 millones al finalizar el 2000 y las
exportaciones totales aumentaron de US$4,052 millones a US$5,737
millones.
Tras la crisis financiera más grave en la historia económica del país
volvió el PLD a ganar en 2004 con el Presidente Leonel Fernández y de
nuevo se repiten las cifras azules: Crecimiento promedio de la economía
5.9% (a pesar de la crisis financiera global y el choque de los
precios), inflación promedio de 6.6%, la inversión extranjera directa
aumentó de US$952.9 millones en 2004 a US$3,142.4 millones en 2012 y las
exportaciones totales aumentaron de US$5,936 millones a US$8.670
millones.
En esta cuarta administración del PLD del Lic. Danilo Medina el
crecimiento con estabilidad se mantiene como uno de los principales
compromisos y si bien en 2013 la economía creció 4.8%, por efecto del
fuerte ajuste fiscal, sin embargo el producto creció 7.3% en 2014 y 7.0%
en 2015, los índices inflacionarios en 2013, 2014 y 2015 han sido
respectivamente 3.88%, 1.58% y 2.34%, por cierto los niveles más bajos
desde 1996.
Esta administración del Lic. Danilo Medina, a pesar de contar con una
presión tributaria muy baja (la más baja de la región con excepción de
Guatemala), de apenas 14% del PIB, ha cumplido con la enorme inversión
educativa del 4% del PIB, ha incrementado las redes de protección
social, como reconoce en Informe del Artículo IV del FMI, ha sembrado al
país de obras viales y otras obras de infraestructura, y además ha
cumplido estrictamente con las metas de déficit; este año de 2.3% del
PIB, con la absoluta confianza de las clasificadoras de crédito y los
agentes económicos de que no habrán desajustes presupuestarios a causa
de las elecciones.
Esa es una de las diferencias medulares entre los gobiernos del PLD y
la oposición. En los del PLD se preserva el crecimiento con estabilidad,
se aumenta el gasto social y se invierte en infraestructuras para el
progreso, mientras con la oposición se pierde la estabilidad, el gasto
social es insignificante y no pueden presentar a la nación ninguna
realización física trascendental.
Por
eso el electorado desde 2004 mantiene su voto y confianza y estas
elecciones marcarán el sexto triunfo consecutivo del PLD y la cuarta
presidencial en primera vuelta.
