Tomado de Diario Libre
WASHINGTON.
La candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, admitió que
su uso del correo electrónico cuando era secretaria de Estado “no tiene
excusa”, pero, en cambio, dijo que la polémica sobre la Fundación
Clinton no tiene ninguna base porque ella nunca dio un trato
preferencial a sus donantes.
En
una entrevista que emitió hoy la cadena CNN, Clinton aseguró que sus
decisiones cuando era titular de Exteriores de EE.UU. (2009-2013) nunca
estuvieron influidas por los intereses de quienes habían donado fondos a
la fundación creada por el expresidente Bill Clinton, como sugieren
varios informes de prensa recientes.
En
cambio, afirmó que en el último año le han hecho “muchas preguntas”
sobre su uso de un servidor privado de correo electrónico para asuntos
oficiales cuando era secretaria de Estado, y se ha dado cuenta de que
cuando intenta “explicar lo que pasó” puede sonar como que está
“tratando de excusar” lo que hizo.
“Y
es algo que no tiene excusa. Quiero que la gente sepa que la decisión
de tener una sola cuenta de correo electrónico fue mía. Me
responsabilizo de ello. Me he disculpado por ello, y ciertamente haría
las cosas de otra forma si pudiera”, subrayó Clinton en una conversación
telefónica con CNN.
“Pero
obviamente, estoy agradecida de que el Departamento de Justicia haya
concluido que no había base para seguir indagando en este tema. Y creo
que el público está considerando todo mi historial y mi experiencia a
medida que toman su decisión” sobre por quién votar en las elecciones
presidenciales de noviembre, agregó.
La
candidata demócrata negó, en cambio, que hubiera conflictos de
intereses entre su participación en la Fundación Clinton y en el
Departamento de Estado.
“Mi
trabajo como secretaria de Estado no estuvo influenciado por actores
externos. Tomé decisiones políticas basándome en lo que creía que era lo
correcto, que mantendría seguros a los estadounidenses y protegería los
intereses de EE.UU.”, defendió.
En
particular, desacreditó un informe publicado esta semana por la agencia
estadounidense AP que indicó que, de los 154 individuos con intereses
privados (no representantes de Gobiernos) con los que ella se reunió
como secretaria de Estado, al menos 85 habían donado o prometido donar
dinero a la Fundación Clinton o a alguno de sus programas.
“Hay
mucho humo, pero no hay nada de fuego. Si ponemos en contexto este
informe de AP, es algo que excluye las casi 2.000 reuniones que tuve con
líderes del mundo, los incontables otros encuentros que tuve con
funcionarios de EE.UU. cuando era secretaria de Estado. Se centró en una
porción muy pequeña de mi tiempo”, dijo.
Clinton
consideró “absurdo” que se argumente que sus reuniones con gente como
“Melinda Gates o el ganador del Premio Nobel (bangladesí) Mohamed Yunus
se debieran a conexiones con la fundación en lugar de a su estatus como
líderes globales altamente respetados”.
No
obstante, la candidata esquivó la pregunta de por qué no se desvinculó
de la fundación cuando era secretaria de Estado pero sí ha decidido
hacerlo ahora que compite por la Presidencia, y se limitó a indicar que
si llega a la Casa Blanca habrá “circunstancias excepcionales” que
requieren que corte esos lazos.
El
candidato republicano, Donald Trump, ha convertido la polémica sobre la
Fundación en un caballo de batalla y ha llegado a pedir el cierre de la
organización caritativa, además del nombramiento de un fiscal especial
para que investigue posibles conflictos de intereses durante el periodo
de Clinton como secretaria de Estado.