Publicado el 12 de octubre 2007/El Nuevo Diario
Mayobanex De Jesús Laurens.
Su
contribución a la sociedad barahonera es inmensa. Formó parte de todos
los consejos de administración de las instituciones sin fines de lucro
de la provincia, cuya presencia era el aval para que las mismas sean
bien administradas y se destacaran.
Junto a un grupo de notables de la época gestionaron un centro
universitario para Barahona. Gracias a ese esfuerzo nace el Centro
Universitario Regional del Suroeste-CURSO. El Patronato Nacional de
Ciegos estuvo entre las instituciones que, gracias a su entrega y
sacrificio, logró conseguirle múltiples aportes realizados por
personalidades e instituciones. Sus contribuciones siempre se hacían
sentir, pues nunca escatimó esfuerzo para socorrer a las entidades que
requerían su ayuda.
El Centro de Rehabilitación, el Cuerpo de Bomberos, la Banda de Música,
la Defensa Civil, la Cruz Roja, entre otras instituciones de carácter
social formaban parte de su vida. Su agenda detrás del escritorio de su
oficina le servía para anotar todas las actividades en que debía
participar a diario. El Club Rotario, Cobo Club, Club de Leones, fueron
lugar de encuentros de su trajinar en pos de hacer cada vez más amigos y
contribuir con el fortalecimiento de cada una de esas instituciones.
Graduado en 1941 de doctor en farmacias y ciencias químicas, su
profesión le permitió dedicarse al oficio de farmacéutico, instalando un
negocio de esta naturaleza en la calle Jaime Mota, esquina María
Montez. Aquí levantó su familia junto a su esposa.
Era hombre de unas relaciones humanas extraordinarias. De vasta
cultura. La lectura era su hobby favorito. En su biblioteca personal no
faltaba un clásico. Me hablaba con insistencia de cada uno de ellos.
Tenía un profundo dominio de la gramática. Conversaba leyéndote los
labios y corregía de inmediato cualquier palabra mal pronunciada. Muchos
fueron los escritores de la provincia y la región que lo utilizaban
como corrector de estilo, debido a su agudeza gramatical. Cada obra de
Don Negro Suero pasaba primero por su revisión.
Gustaba de la política. Militó en el Movimiento 14 de Junio y fue
perseguido por la Tiranía. Crítico de la época del oscurantismo de los
12 Años de Balaguer. Defensor del gobierno de los 7 meses y de los
principios bochistas. Muy a pesar de su simpatía partidaria, ayudaba en
colaboración a todas las organizaciones políticas que le solicitaban su
colaboración. Sin duda un gran munícipe y un extraordinario barahonero.
El 17 de octubre del año 2002 dijo adiós. La banda de música
acompañaban a los bomberos en el recorrido hacia su morada final. Su
querida UASD lo acogió en el Campus I del CURSO, del cual fue fundador y
miembro permanente de su Patronato. Toda su familia y la comunidad
barahonera hoy le recuerda. Doña Milquella sigue sintiendo la pérdida
irreparable, pero revive sus virtudes. Sus hijos les dan el aliento para
sobreponerse y continuar al frente de la farmacia y la familia. Toñito,
Selma, Carmen, Rafael, Karel, guardan el orgullo de haber tenido un
gran padre y un ser sin igual.
Siempre te recordaremos, Don Antonio Méndez, gran hombre de bien.
Siempre te recordaremos, Don Antonio Méndez, gran hombre de bien.