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El coronavirus ha cambiado el pulso electoral en la República Dominicana. De momento solo se habla de Covid-19, las medidas gubernamentales, los informes diarios de contagios y fallecidos del Ministerio de Salud Pública, y las distintas situaciones que se están generando.
Un verdadero impacto social y económico que ha provocado que se vuelquen todas las instituciones del gobierno en una dirección, se aplacen los temas políticos y se apliquen con dureza las medidas para detener el avance de la pandemia en el país.
Toques de quedas regulados, instituciones que operan a medias, otras cerradas y las que ofrecen servicios atestadas de gente a diario, que son alicientes a expandir el virus. Mientras se establecen incentivos para empleados y patronos ante el tema laboral.
En las calles, mientras tanto, crecen las quejas de las miles de gente que a diario se ganan el sustento con los productos, artículos y servicios que ofrecen en el mercado informal, incluidos motoconchistas y sectores profesionales que no están operando, y el incentivo gubernamental no los incluye.
El asunto es clave y vital para el gobierno, el partido oficialista y sus candidatos, con miras a las elecciones congresuales y presidenciales de mayo. Una crisis “pandémica” bien administrada, con poco ruido y exitosa, tendrá efectos positivos para exhibir logros.
Por el contrario, si la crisis se escapa de control, los casos confirmados y los fallecidos aumentan de forma desproporcionada, con las protestas de los "parados", que ahora no tienen forma de trabajo, el remedio pudiera ser peor que la propia enfermedad.
El gobierno tiene una papa muy caliente por delante. Las medidas que implemente serán reconocidas por unos y vapuleadas por otros. Pero mayo pudiera dejar un sabor agradable o desagradable al “guiso electoral”.
Lic. Mayobanex De Jesús Laurens
miércoles 01 de abril de 2020.
Lic. Mayobanex De Jesús Laurens
miércoles 01 de abril de 2020.