La versión de los policías es que,
supuestamente, confundieron el vehículo marca Kia, color blanco, con uno que
estaban persiguiendo.
Hasta el momento la Policía no ha dicho
exactamente a quiénes perseguía y las razones por las que dispararon hasta
acribillar a los esposos, sin mediar si quiera palabras.
Por el caso fueron apresados seis
agentes de la Policía Nacional que integraban la patrulla policial que asesinó
a la pareja de esposos. Ellos tendrán que presentarse el miércoles ante el
juzgado de atención permanente de Villa Altagracia para el conocimiento de su
medida de coerción.
Esa patrulla era integrada por el
segundo teniente Victorino Reyes Navarro, el sargento Domingo Perdomo Reyes,
los cabos Norkys Rodríguez Jiménez y Ángel de los Santos, así como también los
rasos Anthony Castro Pérez y Juan Manuel Ogando Solís.
En el caso también está involucrado el
coronel César Martínez Lora, comandante del operativo de Villa Altagracia,
quien fue suspendido hasta tanto se realicen las investigaciones de lugar. No
figura, sin embargo, entre los imputados del asesinato.
Sobre Martínez Lora se ha publicado que
trabajó para la Dirección Nacional de Control de Drogas y fue despedido por,
supuestamente, “ocultar la droga que incautaba para luego negociarla” cuando se
desempeñaba como inspector de la DNCD en Higüey.
La Policía sigue sin confirmar esta
información, al igual que el ministro de Interior y Policía, Jesús Vásquez
Martínez, que el pasado fin de semana fue preguntado en varias ocasiones sin
ofrecer respuestas.
El vocero de la Policía Nacional, Miguel
Balbuena, dijo que se encontraban en medio de una investigación sobre el caso y
que en el momento oportuno explicarían a quiénes estaban buscando los policías
cuando mataron a Joel y Elizabeth.
Interior y Policía dijo el jueves 1 de
abril que había creado una comisión externa «para realizar una verdadera y
efectiva depuración de la institución para separar el personal que no cumpla
con el perfil ético, moral y la adecuada formación».
La entidad, sin embargo, no ofreció los
detalles de quiénes integrarían esa comisión externa ni cómo serán sus
trabajos.
Los esposos fueron sepultados la tarde
del viernes 2 abril en medio de amplias muestras de dolor y consternación de la
sociedad dominicana.
Se trataba de dos pastores que
participaban de una campaña evangélica en Villa Altagracia. Residían en el
sector Cuesta Linda, en Sabana Perdida de Santo Domingo Norte. Tan solo tenían
dos meses de casados.