miércoles, 1 de junio de 2011

EL ANALISIS DE BERNARDO VEGA!!! Experto analista ve Hipólito Mejía al hablar se convierte en su peor enemigo

"DDB haciendo historia en las comunicaciones digitales"
La estrategia de Hipólito y el PRD
Por BERNARDO VEGA*
*EL AUTOR es escritor, historiador y economista. Reside en Santo Domingo.


Hipólito Mejía es su peor enemigo al hablar sin pensar, metiendo la pata.

Hace dos semanas, en esta misma columna, dimos a conocer y analizamos los resultados de la encuesta de Penn Schoen Berland auspiciada por Noticias SIN y Antena Latina. Hace una semana, utilizando otros resultados de esa encuesta, sugerimos cómo el PLD podía agregar votos para ganar. Hoy, como prometimos y usando los datos de la misma encuesta, sugeriremos una estrategia para que el PRD y el binomio Mejía-Abinader se mantenga arriba.


La gran ventaja para el PRD es que la encuesta evidencia que los votantes están muy inconformes con el gobierno, muy pesimistas y quieren cambio. Si las elecciones hubiesen sido a finales de abril pasado Hipólito hubiese ganado en primera vuelta. Un 58% de los votantes percibe que el PRD va a ganar; un 76% piensa que el país va en la dirección equivocada cuando en el 2008 tan sólo un 44% pensaba así; un 85% piensa que la economía del país va en la dirección equivocada; apenas un 38% está satisfecho con la labor del actual gobierno.

Un 41% está más satisfecho con los gobiernos de Leonel Fernández, pero un 57% está más satisfecho con el gobierno de Mejía del 2000-2004. Un 56% piensa que las cosas ahora están peor que cuando gobernaba Mejía, a pesar de la crisis bancaria. Un 64% piensa que hay más corrupción ahora que cuando Hipólito era presidente y apenas un 26% de los propios peledeístas creen que ahora hay menos corrupción. Hay más simpatizantes o miembros del PRD que del PLD. El candidato del PRD es el único que es percibido (44%-39%) más favorablemente que desfavorablemente, aunque no llega al 50%. Danilo Medina está en 32% favorable – 42% desfavorable.

Los principales problemas citados como que tienen que ser enfrentados por el próximo gobierno son el costo de la vida, nuevos empleos, mejorar la educación y combatir la corrupción. Esos cuatro problemas suman un 78% de todas las quejas.

¿Qué debe hacer Hipólito? Concentrarse en atacar esos cuatro problemas. A diferencia del Perú donde a una semana de las elecciones el 12% sigue indeciso, en el nuestro a un año de las elecciones tan sólo un 3% lo está. A quien hay que conquistar, pues, es a los independientes que ya suman un 18% del electorado, cuando antes apenas era un 7%. Son los votantes más inteligentes, pero también los más decepcionados con los gobiernos. La encuesta evidencia que si Vargas Maldonado apoya a Mejía, sus votos aumentarían.

Hipólito tiene un problema de credibilidad en su gestión económica debido a la crisis bancaria que enfrentó y la forma en que lo hizo, a pesar de que durante los dos primeros años de su gobierno su gestión económica fue positiva, aunque auspició grandes préstamos duros, corruptos y sobrevaluados. Su problema se parece al de Omala en Perú y este lo enfrentó anunciando antes de las elecciones quiénes conformarán su equipo económico. Hipólito iría bien en imitarlo y también a Leonel Fernández, quien colocó a dos prominentes empresarios en su equipo económico. Un equipo de empresarios anunciado ya por Hipólito Mejía conformando su equipo económico crearía mucha confianza y también ayudaría en la captación de fondos. La tarjeta de crédito de Pepe Goico fue lo que inició la corrida contra Baninter. El dejarlo fuera de su equipo de seguidores ayudaría.

Hipólito Mejía es su peor enemigo al hablar sin pensar, metiendo la pata. (No someter a la justicia a sus “cachanchanes”, denunciar tratados comerciales internacionales, etc. ). Leer más discursos y contestar menos a periodistas, ayudaría.

Su campaña, incluyendo anuncios, ¿debe ser “positiva” o “negativa”? Con los recuerdos de los efectos de la crisis bancaria tan frescos, tiene necesariamente que ser “negativa”, atacando al actual gobierno por los problemas económicos, la mala educación y la corrupción, aunque sobre este último punto le pueden contestar con expedientes hasta ahora archivados.

*Reproducido de Hoy