Redacción/BBC Mundo
Martes, 24 de abril de 2012/Tomado de BBC.MUNDO
El plan utilizaría naves espaciales robóticas para obtener componentes químicos de los combustibles y minerales como platino y oro de las rocas.
Su objetivo incluye, además, crear un depósito de combustible en el espacio para 2020.
Sin embargo, varios científicos respondieron con escepticismo a la idea, tildándola de audaz, difícil y extremadamente cara.
Aseguran que no ven la forma en que podría ser rentable, incluso con el valor del platino y oro alrededor de US$1.600 la onza. Una misión de la Nasa que estaría por traer sólo 60 gramos (dos onzas) del material desde un asteroide a la Tierra costará alrededor de US$1.000 millones.
Primer paso
El paso inaugural, que debería alcanzarse entre los próximos 18 a 24 meses, lanzaría el primero de una serie de telescopios privados que buscaría asteroides ricos en recursos minerales. La intención sería abrir la exploración del espacio profundo a la industria privada.“No esperamos que esta empresa sea un exitazo financiero de la noche a la mañana. Esto va a tomar tiempo”
Eric Anderson
La compañía, conocida como Planetary Resources, también está respaldada por el operador pionero en turismo espacial, Eric Anderson, el fundador de X-Prize, Peter Diamandis, el hijo del excandidato presidencial de EE.UU., Ross Perot Jr. y el astronauta veterano Tom Jones.
“Tenemos una visión a largo plazo. No esperamos que esta empresa sea un exitazo financiero de la noche a la mañana. Esto va a tomar tiempo”, dijo Eric Anderson a la agencia de noticias Reuters.
Los multimillonarios esperan que los rendimientos financieros reales, que están aún a décadas de distancia, vendrán de la minería en los asteroides en busca de metales del grupo del platino y los minerales raros.
“Si uno mira hacia atrás históricamente, lo que ha impulsado a la humanidad a realizar las inversiones más grandes en exploración y transporte es ir detrás de los recursos. Ya sea los europeos detrás de las rutas de las especies o los colonos estadounidenses hacia Occidente en busqueda de oro, el petróleo , la madera o la tierra”, explicó Diamandis.
Escepticismo
Entre los fundadores del proyecto está el director de cine y explorador, James Cameron.
Entonces, podría ser enviada a la órbita terrestre para reabastecer de combustible a los satélites comerciales o a las naves espaciales.
El profesor Jay Melosh, de la Universidad de Purdue, dijo que los costos eran demasiado elevados, llamando a la exploración del espacio como “el deporte de los países ricos y que aquellos que desean demostrar su poderío tecnológico pueden darse el lujo de disfrutar”.
Eric Anderson, quien cofundó la firma de turismo espacial, Space Adventures, dijo que estaba acostumbrado a los escépticos.
“Antes de empezar a enviar al espacio a ciudadanos comunes, la gente pensaba que eran castillos en el aire”, dijo.
“Estamos en esto desde hace décadas. Pero no es una obra de caridad. Y vamos a ganar dinero desde el principio”, concluyó Anderson.
Por su parte, el científico espacial David Whitehouse dijo a la BBC: “Creo que este grupo está explorando estas tecnologías porque sabe que hay un premio allí afuera, en el Sistema Solar, y que bien vale la pena tener (…) hay más oro, platino y aluminio del que jamás se haya extraído en la Tierra o que se podría extraer en el futuro de la corteza de nuestro planeta”.