Bienvenido Heredia
La pobreza está definida cono una situación o forma de vida en la que no hay o existe poco acceso o falta “de los recursos para satisfacer las necesidades físicas y psíquicas básicas humanas que inciden en un desgaste del nivel y calidad de vida de las personas, tales como la alimentación, la vivienda, la educación, la asistencia sanitaria o el acceso al agua potable.”
La pobreza también se considera como la falta de empleo, la falta de ingresos o un nivel bajo de los mismos. “También puede ser el resultado de procesos de exclusión social, segregación social o marginación.”
Para Carlos Marx la pobreza es “un hecho básicamente social, determinado no por la falta de medios sino por la distribución desigual de los resultados de la producción.”
En esas últimas dos consideraciones, (la pobreza por exclusión social, segregación social o marginación, y la concepción de Marx respecto a la distribución desigual de los resultados de la producción), es que tipifico la pobreza ancestral y extrema que padece la región Suroeste.
Pero a esas consideraciones sobre las causas de la pobreza e indicadores de pobreza, incluyo las limitaciones que tienen los pueblos pobres para comunicarse con la comodidad y holgura que requiere la humanidad para alcanzar sus objetivos de progreso.
Me explico. Si las carreteras y caminos que comunican los diferentes pueblos entre sí y con las ciudades más importantes del país están en malas condiciones, la pobreza se acentúa. Transportar productos agropecuarios en caminos vecinales maltrechos o destruidos, implica inversión de recursos y tiempo, superiores a los que se invertirían en realizar esa misma operación en caminos acondicionados, pavimentados y hasta señalizados. En consecuencia, los agricultores y/o ganaderos prefieren transportar menos de lo producido o, sencillamente dejar que sus productos se pierdan en el campo.
Transportarse de un pueblo lejano a la ciudad capital, por ejemplo, con una carretera estrecha, llena de baches, llena de arbustos, con pendientes laterales profundas y laderas llenas de piedras sueltas que se deslizan ante cualquier chubasco y sin señalización, implica un tiempo extra de traslado y un peligro permanente en el trayecto hasta su destino final, de ida y de vuelta.
Corregir esos males es contribuir a disminuir la pobreza, porque tanto los productores agropecuarios como quienes nos transportamos por necesidad hacia la ciudad capital, gastamos menos combustibles, consumimos menos tiempo y corremos menos riesgos. Además de que el flujo de personas, comerciantes, turistas y visitantes, aumentará considerablemente, produciendo un dinamismo social y económico importante para nosotros.
Eso está haciendo el Ministro de Obras Públicas, Gonzálo Castillo con la significativa ampliación que está ejecutando en la carretera Barahona-Azua-Baní.
Con el apoyo firme del Presidente Medina, Gonzalo está eliminando los derrumbes y ampliando el tramo de El Número (Azua-Baní), dando seguridad a los transportistas que se veían amenazados constantemente por las gigantescas rocas que allía existían. Está ampliando el tramo que existe entre La Mina y Quita Coraza. También está ampliando un gran espacio próximo a Tábara Abajo, así como la zona de derrumbes al final de Los Cuatro Vientos, próximo a la comunidad de Fondo Negro.
Junto con ello, hace tiempo iniciaron los trabajos de repavimentación y ampliación de la carretera Barahona-Enriquillo y la carretera que une a las Cuatro Bocas de Enriquillo con el Municipio de Polo. Obras que, al concluirlas con los estándares de calidad con que están siendo ejecutadas, cambiará radicalmente la cara depauperada de la secularmente marginada y olvidada Región Enriquillo.
Acaso no se ha visto históricamente como un atraso las maltrechas condiciones de nuestras carreteras y caminos vecinales, especialmente la carretera troncal de esta Región, la carretera Sánchez, así como las carreteras secundarias que comunican los municipios cabeceras de provincia con sus municipios, distritos municipales y secciones? Acaso no es esa condición un indicador de pobreza?
Por eso es que afirmo que el Ministro de Obras Públicas, Gonzalo Castillo y el Presidente de la República Danilo Medina, están haciendo un gran aporte para disminuir los índices de pobreza al que nos han sometid las clases dominantes del país per sécula seculorum. Y por ello además, creo que todos los suroestanos debemos felicitarlos y aplaudirlos, ya que están aplicando el eslogan de Manos a la Obra y Haciendo lo que Nunca se ha Hecho, por nuestro porvenir.