La
directora de la Dirección de Información y Defensa de los Afiliados
(DIDA), Nélsida Marmolejos, reveló que de 47 mil parientes de afiliados
fallecidos, menos de siete mil accedieron a la pensión.
Explicó que eso se debe a que
hay como cinco causas o resoluciones que vulneran los derechos de los
familiares de los afiliados al sistema.
Marmolejos dijo que “es una
situación bastante enojosa y que le quita crédito al sistema, que no
está diseñado para que nadie que se quede con un centavo, y no es que la
AFP no le pague y le devuelva a esa familia lo que tiene ahorrado ese
afiliado, lo que pierde es el derecho a pensión, que es lo que más
necesitan porque es continua”.
Indicó que esa protección ahora
mismo está siendo conculcada y es uno de los temas más graves que tiene
el sistema y, destacó al respecto, que incluso, han estado trabajando y
enviando propuestas a la Superintendencia de Pensiones.
Reveló que el contrato aprobado
por el Consejo entre las aseguradoras y las AFP está vencido hace cuatro
años, pero que todavía se trabaja con el mismo.
Expresó, al ser entrevistada en
el programa Tu Derecho a Saber que conducen Namphi Rodríguez, Elías Ruíz
Matuk, José Gregorio Cabrera, Adelaida Martínez, Edward Tavárez y
Francis Rodríguez, que aquí hay cientos de personas que cuando le hablan
de pensión se horrorizan, no por el problema económico, sino porque se
quedan sin ninguna protección de salud.
“No es justo que a 13 años del
Sistema de Seguridad Social fundado; a 11 años del Sistema de Pensión
corriendo; a 7 años del Sistema de Salud corriendo y usted pagando desde
que empezó en el 2003, a la hora de usted pensionarse le digan que hay
que esperar que el gobierno dé un dinero especial para que a usted le
den su pensión, cuando la ley dice que usted está pagando su Seguridad
Social”, manifestó la directora de la DIDA.
Dijo que en lo que tiene que ver
con los fondos de pensiones, “con relación de la nueva ley tenemos
solamente el derecho a pensión por discapacidad y sobrevivencia en lo
que tiene que ver con el régimen contributivo”.
Manifestó que el sistema todavía
no ha madurado, ya que se está en la fase de acumulación y hay mucho
dinero en ello. Ahora tenemos algunas dificultades para poder acceder a
los fondos de pensiones, pero no tiene que ver necesariamente con las
aseguradoras, sino con el funcionamiento administrativo.
“Tenemos muchas trabas, como las
regulaciones ilegales que se han establecido en contra de la ley que no
permitan que tu accedas al disfrute de salario. Por ejemplo, una
persona que empiece a trabajar hoy, no sabe que está en una AFP, le dan
un carnet y no le explican más nada”, dijo.
Explicó que “el sistema lo
afilia a una AFP, esa persona puede tener un accidente de origen laboral
o común y fallece. La familia no tiene idea, porque no hay un nivel de
información para que los ciudadanos sepan, y si se enteran dos años
después que su pariente estaba afiliado, lo correcto sería que a esa
señora y a sus hijos le correspondiera su pensión por derecho, pero
sucede que hay una resolución administrativa del Consejo que establece
que después de dos años si no lo reclaman ya perdieron sus derechos a
pensión. Ese dinero lo están perdiendo el pariente o descendiente”.
Destacó que hay otras
resoluciones que son peores, entre las que señaló, que una de ellas, por
ejemplo, es que si una persona después que llega a los 60 años tiene un
accidente común no le corresponde fondo de pensiones porque lo excluyen
del sistema, ya no puede acceder a los servicio aunque esté trabajando
activamente.
“Esa situación impide que el
afiliado acceda a los beneficios, por ejemplo a usted lo excluyen porque
si esta persona se suicida, aunque haya trabajado y cotizado, no tiene
derecho ni siquiera su familia a reclamar.
Manifestó que el reclamo
cotidiano de la gente indica que hay que corregir muchas cosas y que por
eso “insistimos que el sistema debería ser agilizar las respuestas a
los reclamos de los afiliados porque no todos tienen para pagar
abogados.
“Hay situaciones, como es el
caso de la salud de los pensionados, en las que tenemos una denegación
de la justicia y en la que se vulneran los derechos de los afiliados,
pero no es que la ley es mala, es que los que la estamos aplicando no lo
estamos haciendo bien”, dijo Marmolejos.
Campaña de información de la DIDA
Marmolejos explicó que el rol de
la DIDA es orientar y ayudar a los afiliados a la Seguridad Social en
los temas que tienen que ver con el sistema de la Salud, pensiones y
riesgo laboral.
Anunció que la entidad pronto
tendrá mostradores de información y asistencia en las clínicas para
estar más cerca de los afiliados, orientarlos y crear una cultura de
empoderamiento del ciudadano.
Asimismo, a finales julio, iniciarán una campaña de información al afiliado a nivel nacional.
Dijo que esto se podrá hacer
gracias a que para este año el presidente de la República dio un
presupuesto adicional a la DIDA de 80 mil millones de pesos, los que se
suman a los 92 millones que tenían y además, con estos recursos abrirán
cinco locales más.
Explicó que las ARS´s venden
servicios que administran el riesgo de los afiliados, pero que el fallo
está en que no explican lo que ofrecen.
Sobre depósitos en clínicas
La directora de la DIDA
manifestó que el gran problema que existe ahora a nivel de quejas de los
usuarios y por lo que más llamadas reciben, es el irrespeto al carnet
de asegurado.
“Por qué si usted tiene un
carnet para dejarlo ingresado, lo obligan a dar un depósito, a lo que
hemos llamado cobro indebido; la otra cosa es que el plan de salud tiene
una serie de exclusiones que no permite resolver los problemas básicos
de salud”, explicó.
Agregó que “esas situaciones
generan descontento y crisis en los afiliados. También hay otro caso, y
es que usted está ingresado le están cobrando por encima de lo que debe
pagar y le secuestran al paciente, esas son malas prácticas que llegan
generalmente a la DIDA”.
Dijo que la lógica de la DIDA no
es ni la de la Superintendencia ni la del Consejo de Seguridad Social
sino la de los derechos de los afiliados y responder a sus reclamos,
pero que su satisfacción está en que más del 97% de las personas que van
a buscar una solución a la entidad la encuentra.
“Creo que hay una situación que
nos interesa destacar, estamos acostumbrados a reaccionar a airadamente
ante un hecho pero no a actuar, porque “cuando una persona llega a una
clínica, donde le reclaman un depósito, coge su ´cuerda´ y paga, y
después que ese paciente sale ya no hace más nada, eso es incorrecto,
eso va a permitir que esa práctica no desaparezca”, destacó.