Tomado de Dicom
NUEVA
YORK.- El presidente Danilo Medina llamó hoy a los países
latinoamericanos y caribeños a trabajar juntos, a transformar las
estructuras productivas y distributivas y a invertir en la educación de
calidad para no perpetuar la pobreza y la exclusión.
“La
República Dominicana está entregada a esa tarea de mejorar la calidad
educativa, como también lo estamos en lograr las transformaciones
necesarias para que nuestra economía crezca en equidad, con un Estado
presente y activo para apoyar a nuestro pueblo”, recalcó.
“La
agenda post 2015 es la ocasión para enfocar nuestros esfuerzos en la
raíz de los problemas… Pongámonos, pues, a trabajar, desde hoy, en crear
países con igualdad de oportunidades, de acceso y de desarrollo para
todos nuestros ciudadanos. Trabajemos por la equidad, por la solidaridad
y por el reparto justo de los recursos que nos ofrece este planeta que
compartimos”, proclamó el Presidente dominicano.
Danilo
Medina habló en esos términos al pronunciar su discurso ante la 70
Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), donde
aseguró que cuando hay voluntad política ningún reto es demasiado
grande.
Explicó
que de mantenerse la actual composición de los aparatos productivos de
los países latinoamericanos, caracterizados por la heterogeneidad y
niveles muy distintos de desarrollo, la región seguirá siendo la más
desigual del mundo, imposibilitando que todos puedan beneficiarse y
participar del crecimiento de forma proporcional.
“Si
queremos que este escenario no siga perpetuando la exclusión, no hay
otra opción que apostar decididamente por la calidad de la educación. Y
apostar en serio”, enfatizó.
Desigualdad, el gran enemigo
Danilo Medina identificó la desigualdad como el gran enemigo del
desarrollo sostenible y la principal tarea pendiente del mundo,
especialmente de Latinoamérica.
Resaltó
que nuestros países tienen muchos avances que celebrar, pero también
tienen urgentes llamados a la acción en el combate a la pobreza y la
desigualdad.
“Por
un lado, América Latina es, a continuación de Asia, la región donde
mayor población se incorporará a la clase media, con más de 130 millones
personas alcanzándola antes de 2030, según la OCDE. Sin embargo, junto
al África Subsahariana, es también al área más desigual del mundo”,
explicó el Gobernante dominicano.
Recordó que aún hoy, el 10% más rico de los latinoamericanos capta el 32% de los ingresos y el 40% más pobre solo alcanza 15%.
También
que en la región, empresas globalizadas conectadas al comercio
internacional aportan el 67% del PIB, pero solo el 20% de los empleos;
las pymes aportan un 22.5% del PIB y el 30% del empleo, mientras las
microempresas y economía informal que solo aporta el 10.5% de la
riqueza, generan el 50% de los empleos.
“Es
decir, estamos avanzando decididamente en la lucha contra la pobreza,
pero ésta sigue siendo demasiado grande, y se ve agravada por la
desigualdad.
El
presidente Danilo Medina coincidió con lo planteado por la CEPAL en el
estudio “Inestabilidad y desigualdad”, de que el crecimiento con
igualdad requiere de la transformación profunda de las estructuras
productiva y distributiva de los países.
“Necesitamos
tanto de un sector productivo responsable, que garantice la generación
de riqueza en todas las capas de la sociedad, como de un Estado activo y
eficiente en la redistribución de la riqueza y la creación de
oportunidades”.
Transformar, el camino
Al referirse a Latinoamérica como una “fábrica estructural de
desigualdad”, como señala un estudio de la CEPAL, urgió la
transformación de la estructura productiva de nuestras naciones para que
juntos, los países latinoamericanos y caribeños avancen a la misma
velocidad hacia un modelo que beneficie a grandes y pequeños.
Danilo
Medina afirmó que las políticas sociales son el complemento
indispensable de la productividad y de las mejoras en el mercado de
trabajo, por lo que defendió que junto las transformaciones en la
estructura de nuestras economías, sea revindicado el papel del Estado
como redistribuidor eficiente de la riqueza, creador de oportunidades y
defensor de los derechos de todos los ciudadanos.
Reclamó
que no se puede seguir planteando la relación entre políticas
económicas y políticas sociales como un conflicto sin solución y que por
el contrario, tenemos la responsabilidad de hacer caminar a ambas de la
mano y en una misma dirección para reducir la desigualdad.
“Porque
solo así lograremos enfrentar problemas que parecen endémicos, pero
cuyo origen está, en gran parte, en el reparto desproporcionado de los
recursos disponibles”.
Desigualdad = violencia e inseguridad
“En la desigualdad encuentran su origen muchos de los retos que
enfrentamos a escala mundial, entre los que se encuentran también la
violencia y la inseguridad, que azotan especialmente a Latinoamérica y
El Caribe”, aseguró el Presidente dominicano.
Señaló
además que los efectos de la violencia sobre bienes y personas le
cuestan a la región un 14,2% de su PIB y que la desigualdad es el caldo
de cultivo que aprovecha el crimen transnacional y el narcotráfico para
reclutar a jóvenes, a edad cada vez más temprana, y robarles sus
oportunidades de futuro.
Dijo
esperar que al celebrarse el año que viene en la ONU la Asamblea
General Especial de las Naciones Unidas sobre Drogas, se haya
desestimado para siempre la idea de que este es un problema que afecta
solo a algunos países.
Deploró
que las decenas de miles de muertos que la llamada “guerra contra el
narcotráfico” ha dejado en América Latina y el Caribe sean tratados como
“daños colaterales, calificándolo como desastre humanitario que tiene
su origen, demasiado a menudo, en políticas mal concebidas y peor
ejecutadas.
“Es
necesario un cambio de orientación, nuevos consensos internacionales,
mas actualizados y realistas que dejen espacio para que los gobiernos
nacionales diseñen políticas adecuadas a sus circunstancias, tal y como
ya lo están haciendo algunos países aquí representados”, reclamó.
Unir esfuerzos, enfocar esfuerzos y tener voluntad política
Celebró los avances alcanzados por la comunidad internacional con los
objetivos del milenio y manifestó su convicción de que somos capaces de
lograr aun más cuando orientamos correctamente nuestros esfuerzos,
citando como ejemplo la experiencia dominicana.
“Hemos
hecho nuestra la agenda post 2015 y también su propósito de crear una
gran alianza entre el sector privado, sociedad civil y gobierno, para
que los cambios sean duraderos y sostenibles”, recalcó.
“Estamos
convencidos que cuando hay voluntad política ningún reto es demasiado
grande. No dudo que podremos encontrar la voluntad para superar los
retos que tenemos ante nosotros”, exclamó Danilo Medina.
