Aristófanes Urbáez/Tomado de Listin Diario
*La vida es un ejercicio y de autogobierno”
(George Santayana y Borrás).
1.-
LO DISIMULAN BIEN, pero se les ve el refajo. Ni Joao Santana, ni su
mujer la Moura, han dicho que Odebrecht aportó dinero para las campañas
de Danilo del 2012, ni del 2016, porque en Brasil hay una pesadilla
colectiva y cuál es el poder que tiene Danilo para impedir que esos
dueños de montañas de dinero no le mencionaran. ¿Por amor? No, que no
dieron dinero, y eso es lo que han dicho: que sí recibieron de equipo de
campaña de Danilo como pago para sus propagandas; y tal y como decía la
pasada semana mi emperador de San Cristóbal, el objetivo de algunos
casquivanos, que han salido pelados porque sus corruptos preferidos sí
que han sido mencionados, son capaces de agarrarse de los cactus de los
caminos de San Juan, para encartar al Presidente.
Son los mismos que
viven en los medios silenciando o defendiendo corruptos cuyas fortunas
dejan en el suelo los 92 millones de US$ repartidos por Rondón, aunque
no estoy de acuerdo con César en cuanto a que el ‘lobismo-USA’ es legal.
Aquí sí es ilícito el tráfico de influencia, la concusión, la
asociación de malhechores y otras figuras señaladas en nuestro Código
Penal como delitos. De modo, pues, que ésos que escriben y vocean por la
radio y la TV, deben presentarse (o hacerse presentes con sus abogados
con los testimonios y las pruebas contra Danilo), sobre todo, ahora que
parece que la alfombra se ha ensanchado, y parece que “curtidos”
juristas y simples “gallos locos”, comienzan a defender a los inculpados
porque aquí, como decían Juan Bosch, es “asigún sea”. Pero no ven
(aparte del peligro de la deuda externa) los camiones llenos de
productos voceando por todas las calles, mientras en países
supuestamente más saneados que el nuestro, el hambre hace estragos. De
otro lado, ¿dónde es, en estos tiempos, que la corrupción no es moneda
del curso legal? En España y la Zona Euro se destapan tres escándalos de
corrupción por día, y más: España lidera, pero en los expaíses
socialistas hoy bajo la “gran democracia occidental”, todo tiene tufo a
almizcle, como en la novela “El Perfume”, del escritor alemán Patrick
Süskind.
2.-
HAY ALGO EN EL IMAGINARIO y la intención popular que hará que los
teatreros despierten con pesadillas, ésa que Marx dijo que vendrá de
“sueños de las generaciones muertas”, a oprimir el cerebro de los vivos.
Ellos creen que están al pie de la victoria contra partidos
tradicionales, aunque éstos -y sobre todo, su pequeña burguesía o
inmensa clase media, y que según Bosch, ha jugado un papel fundamental
en todos nuestros procesos históricos--, que son los que hacen las
opinión pública (y que, por algún portillo, le entra un airecito de la
corruptela, que le mantiene su estatus quo de clase media); digo, los
arlequines, los teatreros, que son rechazados en todas las elecciones,
sueñan que esa enorme masa desplace a los viejos partidos, y les
entregue el poder en bandeja de plata, lo que no podrá ser, porque esa
pequeña burguesía, protesta y critica, pero a la hora de la verdad no
vota por esa minoría, que se “la busca” formando partiditos bisagras que
les reditúan, en tiempos de zafras, lo mismo que sus ONG y servicios a
las agencias extranjeras o “cooperación internacional para los países”
(aunque por la crujía de Europa, ya pobres somos todos). Esa ventana que
practican las llamadas grandes democracias mantiene a estos teóricos
combatiendo en la prensa, radio y TV con un discurso radical, que sus
financiadores saben que no pasarán de la lucha “verbal”; que jamás
llegará al compromiso de la lucha consciente y seria para cambiar las
estructuras del status quo. Desde México hasta Alemania (con todas las
demás “democracias” en medio, los dirigentes de los partidos grandes
saben que es así y reparten su ración de boa. No importa lo que se hable
y señale ahora, para el 1920 aquí, los grandes dominarán de nuevo,
porque la gente no confía ni en la seriedad, ni el radicalismo de los
teatreros. Ahora bien: hay que ir dejando atrás las manzanas señaladas
como podridas. Ya jugaron su papel y restan, no suman. La lucha es entre
los mismos, aunque López Obrador, en México, y Abinader Corona, no
reconozcan nunca que perdieron. Es, como decía Balaguer, los opositores
quieren la silla de alfileres para ellos usarla, usufructuándola para
los suyos. Los otros, harán lo que sea para que no se la quiten, haya o
no haya ley de partidos políticos.
3.-
LOS APAGONES, parte del arsenal.- Este es el verano (que no ha entrado,
estamos en primavera) más caliente en muchos años, no por lo de
Odrebrecht, sino por el calentamiento global, y parece que los enemigos
de las plantas de Punta Catalina se han coludido aún más: unos para
desacreditarlas, y otros, para aumentar los apagones. Los que apuestan a
la ingobernabilidad no dejan de manifestar su alegría por los apagones,
aunque se los coman los apagones, que son largos y tendidos. Pero
ignoran, de nuevo, algo fundamental: a Danilo les faltan tres años y
varios meses, y su equipo, Rubén Bichara, debe luchar a brazos partidos
para estabilizar que los que están trabajando, no marchando tras utopías
sin concreción a corto y mediano plazos, se dedicarán a lo suyo, porque
aquí ha habido siempre apagones. Los que necesitan la luz, lo que
quieren es que mejore y estos largos apagones se hagan más llevaderos.