Por: Virgilio Gautreaux P.
Trujillo
encabeza en Febrero de 1930 un Golpe de Estado contra el Presidente
Horacio Vásquez y organiza un fraude electoral en Mayo de ese mismo
año, basado en el uso de la fuerza militar y en el control de la Junta
Central Electoral. Muchos de los que le siguieron en ambas asonadas, en
pocos años, habían sido eliminados por el sátrapa y otros huyeron al
exterior.
La década del cincuenta a nivel mundial se caracterizó
por gran número de procesos de liberación que dieron al traste con el
colonialismo en varias partes del globo. Asimismo, por doquier muchas
naciones se despojaron de férreas dictaduras. En nuestro continente, a
pesar del férreo control norteamericano en el marco de la Guerra Fría,
crecía la agitación social de millones de latinoamericanos hastiados de
gobernantes corruptos disfrazados de eficientes anticomunistas.
El
viejo Tacho Somoza es ajusticiado. Juan José Arévalo encabeza un
gobierno democrático, solidario con exiliados de varias naciones. La
juventud latinoamericana, los intelectuales y su vanguardia liberal,
se lanzaba a las calles y presionaba sus gobiernos para que retiraran el
apoyo a los regímenes fascistas. Estados Unidos a través de la OEA,
lucha denodadamente para mantener sus “aliados” en el poder, pero
coyunturalmente fracasa en el empeño.
Caen regímenes dictatoriales
en Argentina(1956), Colombia(1957), Venezuela(1958) y Cuba(1959).
Trujillo se convierte sucesivamente en huésped de sus colegas Perón,
Rojas Pinilla, Marcos Pérez Jiménez y Fulgencio Batista.
Luego de
la revolución cubana, una oleada de fervor patriótico recorrió todo el
continente americano. El rosario de dictaduras hilvanado por Washington
bajo el manto de “muralla anticomunista” y la Guerra Fría, se resquebrajaba.
En
Abril de 1959 se produce un desembarco de unos 200 guerrilleros en
Panamá proveniente de Cuba. El 31 de Mayo y a principios de Junio de ese
mismo año, dos aeronaves con más de cien combatientes nicaragüenses
aterrizan en la tierra de Sandino y Rubén Darío a combatir la criminal
dictadura de la familia Somoza.
Mientras
parte importante del mundo se sacudía de sus cadenas, en la República
Dominicana se mantenía paralizada la movilidad social y política. El
régimen trujillista mediante una verdadera Gestapo mantiene atemorizada
la población a nivel nacional, a la vez que realiza secuestros
asesinatos y golpizas a los opositores. Una poderosa maquinaria de
propaganda, adoctrinamiento y represión, mantiene atemorizado a millones
de dominicanos. A su vez, los exiliados fuera del país también sufrían
los zarpazos del tirano.
La llegada de Fulgencio Batista a
República Dominicana huyendo de las tropas de Fidel Castro, así como los
reclamos formulados en fecha 12 de Febrero de 1959 por el nuevo
Gobierno cubano de que Batista fuera repatriado para someterlo a la
justicia de ese país y la negativa de Trujillo, tensó notablemente las
relaciones bilaterales. Al mismo tiempo, sucesos frente a las embajadas
respectivas en ambas capitales, tornaron más enrarecido el ambiente.
Finalmente las relaciones Diplomáticas se rompieron el 26 de Junio de
ese año. Conflictos de otra naturaleza, pero reflejo de una tirantez
mutua entre Venezuela y República Dominicana, habían tenido como
resultado la ruptura de los vínculos con la patria de Bolívar,
exactamente un día antes de la llegada de los patriotas por Constanza.
Para
la segunda mitad de los años cincuenta y luego de 25 años de un férreo
control del país, lenta pero paulatinamente comienzan a surgir en
diferentes puntos del país células de opositores, la mayoría con
limitado campo de acción, concentrándose en difundir noticias
internacionales, escuchar programas de exiliados antitrujillistas y
trazar planes de cómo terminar la dictadura. A estos movimientos
responde la tiranía recrudeciendo sus acciones de infiltración en los
grupos de oposición, combinado con extremas medidas represivas.
Con
una efervescencia política recorriendo América, el exilio dominicano
consideró pertinente el momento para el derrocamiento armado de la
tiranía de Trujillo cuya duración llegaba a casi tres décadas. Es bueno
ver la determinación de nuestros patriotas de Junio que a pesar de los
inconvenientes y sabotajes nunca dudaron en venir a combatir uno de los
regímenes más cruel y despiadado de la historia latinoamericana.
El
sátrapa se preciaba de haber suscrito Convenciones en Ginebra y La
Haya, en favor de los Derechos Humanos y el respeto a prisioneros de
guerra, así como numerosos tratados mundiales y regionales en esta
materia. Sin embargo, en el caso de nuestros patriotas, las decenas de
expedicionarios capturados con vida fueron sometidos a bárbaras torturas
y salvajes tormentos, especialmente fomentados por Ranfis Trujillo y su
camarila. Es increíble lo benévola que ha sido la justicia dominicana
(y la historia) con los chacales torturadores muchos de los cuales
murieron tranquilos en sus hogares y los que aún sobreviven, nadie osa
señalarlos con el dedo acusador. Algunos hábilmente se incorporaron a
partidos políticos donde fueron bien recibidos (y reciclados).
Es
destacable el tormento y el exterminio a que fueron sometidos nuestros
compatriotas luego de ser capturados, lo cual marcó una notable
diferencia con otras dictaduras igualmente criminales de la cuenca del
Caribe. Trujillo y su hijo Ranfis, montaron toda una logística y
seleccionaron un personal para manejar los prisioneros, los
interrogatorios, los equipos e instrumentos de tortura, las matanzas y
las diferentes modalidades de disponer de los cadáveres. Una
infraestructura y organización-guardando la distancia-similar a la que
tenían los nazis en sus campos de concentración.
El régimen de forma triunfalista destacaba que había sido “el pueblo campesino” quien
había derrotado y descuartizado a los expedicionarios, cuando en
realidad la gran mayoría fueron apresados y exterminados en las
ergástulas trujillistas, los centros de tortura de Cárcel de la 40 y del
kilómetro 9. El pueblo dominicano desconocía cual había sido en
realidad el trágico y doloroso final de los patriotas.
El gobierno
del sátrapa desplegó todo su andamiaje propagandístico para resaltar su
“aplastante victoria”, para inflar su fatuo orgullo y como forma de
atemorizar a quienes se atrevieran disentir de sus actos. Por eso monta
una gigantesca campaña de adhesión de todos los funcionarios, empleados,
obreros, ayuntamientos, mujeres y el pueblo en general. Periódicos,
emisoras, plantas de televisión, revistas y publicaciones del interior
del país, cierran filas en una verdadera apoteosis nacional. En este
contexto, repetir una y otra vez la versión oficial de los del r, se
convierte prácticamente en una doctrina, acompañada de “testimonios” de
campesinos que afirmaban haber combatido (y derrotado) expedicionarios
con simples machetes, garrotes y hasta piedras !!
De esta forma,
se crea y repuja el mito de “la victoria”. En este contexto, a
continuación transcribimos algunas de las versiones que contribuyen-en
apreciación del trujillismo-a fortalecer las bases del régimen:
Héctor
Trujillo Molina (Negro), hermano del tirano fungía como Presidente de
la República desde hacía varios años. El 27 de Febrero de 1960 rindió
ante el Congreso Nacional sus Memorias, detallando las principales
actividades gubernamentales correspondientes al año 1959. Al referirse a
las expediciones de los patriotas, destacó las tensas relaciones
existentes entre la República Dominicana y Cuba, especialmente luego del
ascenso de Fidel Castro al poder. En su exposición detalló que el 14 y
el 20 de Junio se produjeron dos intentos de invasión que habían tenido
el apoyo de los gobiernos de Cuba y Venezuela, los cuales se produjeron
sucesivamente en las zonas de Constanza, Estero Hondo y Maimón.
Continuó
expresando que el primer contingente armado lo constituyeron 56 hombres
que llegaron a la Villa de Constanza en un avión C-46 que ostentaba
fraudulentamente las insignias de la aviación Militar Dominicana. Los
segundos desembarcos ocurrieron en la costa norte del país. Ambos
partieron-precisó-de la Bahía de Nipes en dos yates identificados con
los nombres de Tinita (antigua Doña Rosa) y Carmen Elsa. En la primera
embarcación venían 54 hombres y en la segunda 86.
Manifestó que
los expedicionarios usurparon la bandera de los Estados Unidos de
Norteamérica para sus fines agresores y que sus naves, habían sido
escoltadas por la Fragata de la Marina de Guerra cubana Máximo Gómez.
Igual protección le fue proporcionada por los buques de guerra cubanos
Antonio Maceo y José Martí.
Más adelante dijo que los intentos de invasión fueron exterminados por las Fuerzas Armadas de la República, resaltando la “valiente, decidida y leal colaboración”en esas operaciones bélicas de parte de la población campesina del país, en respaldo del Gobierno.
Ampliando
su exposición sobre el tema destacó que entre el armamento que fue
capturado a los expedicionarios figuraban, además de considerable
cantidad de municiones, fusiles automáticos belgas, “aportados por
Venezuela”, y fusiles americanos ML, suministrados por el gobierno
cubano; ametralladoras calibre 30 y 50, fusiles FAL y Garand, bazucas y
carabinas 30 ML, pistolas 45 y revólveres 38.
A continuación
transcribimos algunos párrafos de la Memoria del Ejército Nacional,
correspondiente al año 1959. En la página No. 230 de este documento,
encontramos lo siguiente:
MEMORIA DE LA JEFATURA DEL ESTADO MAYOR DEL EJERCITO
FRACASADAS INVASIONES A LA REPÚBLICA DOMINICANA
En
fecha 14 de Junio, un avión tipo C-46 procedente de Cuba, aterrizó en
el aeropuerto de Constanza, municipio de La Vega trayendo 56 sediciosos
fuertemente armados, quienes desde el primer momento de su llegada al
territorio nacional, fueron atacados, perseguidos, diezmados y
aniquilados por fuerzas combinadas del Ejército Nacional y la Aviación
Militar Dominicana, con la cooperación de civiles voluntarios.
La
noche del 19 del mismo mes, y al parecer en combinación con el intento
de invasión de Constanza, navegaban hacia el Este sobre el litoral norte
del país dos lanchas Christ-Craft, denominadas “Tininia” y “Carmen
Elsa”, procedentes de Cuba, enarbolando el pabelón norteamericano,
escoltadas por las fragatas “José Martí”, “Antonio Maceo” y “Máximo
Gómez”, de la marina cubana, conduciendo 150 invasores y gran cantidad
de armas y municiones, que intentaban introducir en el país para
subvertir el orden establecido en nuestra patria, llegando en la
madrugada del 20 por las costas de Maimón y Punta Rucia, jurisdicción de
Puerto Plata.-
Este intento de invasión fue aplastado de
inmediato, habiendo sido destruidos todos sus participantes, así como
las lanchas en que llegaron y ocupadas todas las armas que trajeron, por
fuerzas del Ejército Nacional, la Aviación militar Dominicana y la
Marina de Guerra, también con la cooperación de civiles voluntarios,
quienes armados de machetes y palos atacaron y persiguieron sin tregua a
los intrusos. En estas brillantes acciones nuestras Gloriosas Fuerzas
Armadas pusieron de manifiesto una vez más el grado de disciplina y
preparación militares, demostrando así la gran capacidad estratégica de
nuestro querido Comandante en Jefe, Generalísimo Doctor Rafael Leonidas
Trujillo Molina, Benefactor de la Patria y Padre de la Patria Nueva,
quien personalmente dirigió las operaciones.
En estas operaciones
bélicas murieron valientemente (31) soldados y desaparecidos (1) de
esta institución, y resultaron heridos (26), cuyos nombres se detallan
más adelante. Los invasores fueron exterminados en su totalidad, a
excepción de (7) que fueron hechos prisioneros en la zona de Constanza.
Más
adelante en la página 231 de la citada Memoria, encontramos la relación
oficial de bajas (muertos, heridos y desaparecidos) de los tres
frentes:
-EN LA ZONA DE CONSTANZA-
-MUERTOS-
No | Rango | Nombre | Compañia |
1 | 2do Ten. | Sidney Rudy Suero Rosa | 53ra |
2 | Cabo | Arismendy Abreu Durán | 18va |
3 | “ | Severo Chávez y Chávez | 45ta |
4 | “ | Eleodoro Taveras Díaz | 45ta |
5 | Raso | Mario Ernesto Santos Mena | 18va |
6 | “ | Samuel Richardson Brito | 45ta |
7 | “ | Félix M. Henríquez Ventura | 43ra |
8 | “ | Luis Ant. Pérez Castro | 48va |
9 | “ | Aníbal Marte Tissol | 18va |
10 | “ | Carlos Montilla Reyes | 18va |
11 | “ | Gregorio Espinal figuereo | 46ta |
12 | “ | Ml. Ventura Núñez Castillo | 46ta |
13 | “ | Cristino Martínez Peña | 45ta |
14 | “ | Alfonso de los Santos A. | 44ta |
15 | “ | Wenceslao Encarnación P. | 15ta |
16 | “ | Ant. Domingo Díaz Durán | 51ra |
17 | “ | Faustino Figueroa Féliz | 51ra |
18 | “ | José M. Angeles Santos | 51ra |
19 | “ | Alberto Ortiz Quezada | 20ma |
Fuente:
INFORME DEL AÑO 1959 dirigido al Jefe de Estado Mayor General Conjunto
de las Fuerzas de Aire, Mar y Tierra, elaborado por el Jefe de Estado
Mayor del Ejército Nacional-Pág. 231.
ZONA DE CONSTANZA-
-HERIDOS-
No | Rango | Nombre | Compañia |
1 | 2do Ten. | William Páez Piantini | 47ma |
2 | Raso | Pedro Mejía Peña | 48va |
3 | “ | Rafael Alvarez Botel | 48va |
4 | “ | Julio César Mancebo | 51ra |
5 | “ | José Antonio Delgado | 45ta |
6 | “ | Pascual Díaz Medina | 45ta |
7 | “ | Bienvenido Figueroa Mañon | 51ra |
8 | “ | Aquiles Mercedes Banítez | 51ra |
9 | “ | Angel C. Pimentel Ortiz | 33ra |
10 | “ | Rafael Danilo Jiménez | 28va |
11 | “ | Cecilio Reyes Santos | 46ta |
12 | “ | Vicente Nero Castaños | 28va |
13 | “ | Confesor Lazala Araujo | 22da |
14 | “ | Antonio Plasencio Mendoza | 34ta |
15 | “ | José Lantigua suriel | 45ta |
16 | “ | Valentín Almonte Martínez | 51ra |
17 | “ | Alfredo Rodríguez | 49na |
Fuente:
INFORME DEL AÑO 1959 dirigido al Jefe de Estado Mayor General Conjunto
de las Fuerzas de Aire, Mar y Tierra, elaborado por el Jefe de Estado
Mayor del Ejército Nacional-Pág. 231
1-Raso Raúl L. Wagner Encarnación, 53ra. Compañia
-EN LAS ZONAS DE ESTERO HONDO Y MAIMÓN-
-MUERTOS-
No | Rango | Nombre | Compañia | |
1 | 2do Ten. | Miguel A. Rodríguez Aybar | – | |
2 | Sgto | Benjamín Chepard Miller | 8va | |
3 | Raso | Gregorio Ant. Crisótomo U. | 42da | |
4 | “ | Juan R. Ascensio de la Cruz | 4ta | |
5 | “ | Hipólito Inoa Goris | 42da | |
6 | “ | Eladio Pérez Heredia | 29na | |
7 | “ | Rafael Herrera y Herrera | 8va | |
8 | “ | Ramón Ant. Guzmán Torres | 8va | |
9 | “ | Julio de Dios Valdez | 8va | |
10 | “ | Emilio A. Estévez y Estévez | 42da | |
11 | “ | Gregorio A. Crisótomo Peña | 29na | |
12 | Miliciano | Luis Manuel Díaz Tejeda | 53ra | |
Fuente:
INFORME DEL AÑO 1959 dirigido al Jefe de Estado Mayor General Conjunto
de las Fuerzas de Aire, Mar y Tierra, elaborado por el Jefe de Estado
Mayor del Ejército Nacional-Págs. 231 y 232
-ZONAS DE ESTERO HONDO Y MAIMÓN-
-HERIDOS-
No | Rango | Nombre | Compañia | |
1 | Mayor | Anselmo Pilarte | 42da | |
2 | Raso | Gerónimo Peralta | 42da | |
3 | “ | José Lora García | 42da | |
4 | “ | Ramón Ant. Pérez Gutiérez | 42da | |
5 | “ | Félix N. Peralta Martínez | 42da | |
6 | “ | Ricardo Reyes Aybar | 28va | |
7 | “ | Eladio de la Rosa Mateo | 10ma | |
8 | “ | Lino Valdez Fernández | 29na | |
9 | Miliciano | Luis Martínez García | 42da | |
Fuente:
INFORME DEL AÑO 1959 dirigido al Jefe de Estado Mayor General Conjunto
de las Fuerzas de Aire, Mar y Tierra, elaborado por el Jefe de Estado
Mayor del Ejército Nacional-Pág. 232
Conforme a los datos
oficiales anteriores-de seguro manipulados-las Compañias del Ejército
que más combatieron o que resultaron más atacadas por los
expedicionarios, en la zona de Constanza, fueron las 45ta, la 46ta, la
53ra y la 20ma. En las Zonas de Maimón y Estero Hondo fueron las
Compañias 42da, 8va y 29na.
En la Memoria de 1959 elaborada por el
Jefe de Estado Mayor de la Aviación Militar Dominicana, dirigida al Sr
Secretario de Estado de las Fuerzas Armadas, encontramos que en ese año
la cantidad de aeronaves de la fuerza aérea estaba compuesta de la
manera siguiente:
TIPO | NÚMERO |
Aeroplano Mustang P-51 | 32 |
American AT-6 | 41 |
Vampiros MK-1 | 19 |
Vampiros MK-5 | 17 |
P-47 | 18 |
B-26 | 5 |
Comander C-46 | 5 |
Helicópteros | 5 |
Otros | 12 |
Total | 154 |
Fuente: Memoria AMD, 1959, pág 1.
Una
Base aérea principal y otros nueve aeropuertos regulares tenía el país
para ese año. Entre ellos se encontraba el pequeño aeródromo de
Constanza, por donde arribó la nave aérea con 56 expedicionarios.
En la página 59 de esta Memoria aparece el siguiente encabezado:
NUESTRA PARTICIPACIÓN EN LAS OPERACIONES BÉLICAS DE CONSTANZA, ESTERO HONDO Y MAIMÓN
En
la Memoria que esta Jefatura de Estado Mayor presentó el año pasado a
ese Despacho se hizo incapié en lo difícil que resultaba la tarea de
enmarcar en esa relación la multiplicidad de aspectos de una obra tan
vasta como la que ha venido realizando esta institución como centinela
potente y alerta de la paz de la nación, pero se señalaba que ella había
desenvuelto sus actividades sobre la misma base de moral inquebrantable
y de ejemplar disciplina que la han caracterizado desde su creación,
continuando con el mismo ritmo los formidables avances que le han
permitido convertirse en una fuerza de combate de primera clase, que
sirve de ejemplo a instituciones de su género en la América de habla
hispana.
Los sucesos de Junio y Julio de este año han confirmado
plenamente ese concepto. Durante las operaciones bélicas llevadas a cabo
contra los invasores de Constanza, Estero Hondo y Maimón, la Aviación
Militar Dominicana, en una acción rápida y coordinada con el Ejército
Nacional y la Marina de Guerra, acción dirigida personalmente por el
Generalísimo Doctor RAFAEL LEONIDAS TRUJILLO MOLINA, Benefactor de la
Patria y Padre de la Patria Nueva, que culminó con la destrucción total
de las fuerzas lanzadas contra el país por el comunismo internacional,
dio brillantes demostraciones de arrojo, pericia y coraje. Cubriéndose
de legítima gloria, nuestros pilotos, mecánicos y personal de tierra no
tuvieron tregua, conjuntamente con sus compañeros der armas, hasta que
la sedición fue debelada y la paz restablecida.
Obviamente, a
pesar del discurso oficial victorioso de la dictadura, el régimen por
primera vez había sido confrontado militarmente en esa magnitud, por lo
cual la contundencia política de dicho acontecimiento, afectó para
siempre la conciencia nacional. La triunfalista lectura de los nombres
de los mártires en la radio oficial, creó un efecto boomerang, pues
fueron muchos los dominicanos que conocían las prendas morales que
adornaban a muchos de los expedicionarios. Mayor también fue el efecto
que tuvo las campañas de represión, persecución, apresamiento y torturas
contra familiares y allegados de los héroes. Una ola de cancelaciones
afectó centenares de dominicanos en todo el país por el simple hecho de
tener algún tipo de vínculo con los patriotas.
El tirano sofocados
los últimos reductos, emprendió una acelerada carrera armamentista que
incluyó la compra de armamento, la construcción de nuevas
infraestructuras militares y el reclutamiento de nuevos efectivos
militares. Los desplazamientos masivos por aire, mar y tierra durante
el periodo de enfrentamientos, junto a los gastos que originaron los
masivos ascensos, se constituyeron en una pesada carga financiera. A
esto se sumaron elevados montos en gratificaciones a campesinos y
efectivos militares. El estado de alerta militar permanente, también
tiene su contrapartida económica.
MOVIMIENTOS MILITARES EN 1959
ACTIVIDAD | NÚMERO |
Alistamientos como rasos | 5,296 |
Ascensos | 1,532 |
Realistamientos | 1,048 |
Milicianos como rasos | 2,442 |
Bajas por expiración alistamiento | 1,329 |
Fuente:
INFORME DEL AÑO 1959 dirigido al Jefe de Estado Mayor General Conjunto
de las Fuerzas de Aire, Mar y Tierra, elaborado por el Jefe de Estado
Mayor del Ejército Nacional-Pág. 348.
En los meses sucesivos el
trujillismo desarrolla una vigorosa campaña que incluye cantos heróicos,
merengues, poemas, concursos, mítines multitudinarios y desfiles de
empleados públicos y de las empresas del tirano. Las caravanas y loas
permanentes en los medios de comunicación, tienen el efecto de
incrementar la soberbia del “Generalísimo” que ignorando la nueva
realidad nacional y la situación geopolítica del continente, emprende
una ofensiva general contra los desafectos a su gobierno, la iglesia
Católica, Venezuela y Cuba, cuyo punto culminante es el atentado a
Rómulo Betancourt en Junio de 1960 y el vil asesinato de las hermanas
Mirabal en Noviembre del mismo año.
Apenas pasados seis meses de
las expediciones de Junio de 1959, cuando el tirano y sus secuaces
consideraban que su poder absoluto estaba en el cénit, para su asombro
se descubre una gigantesca red opositora que abarcaba jóvenes y adultos
de ambos sexos diseminados en toda la geografía nacional. Para colmo, el
nombre que seleccionan los miembros de la entidad clandestina es en
memoria de la gesta patriótica. La oleada de apresamientos-por la
calidad de los arrestados-conmociona nuevamente el pueblo dominicano.
Hasta la iglesia que era un soporte básico para el régimen, se ve
compelida a trazar una raya de Pizarro contra un Estado criminal con
cámaras de tortura y fuera de control en desmanes y represión.
Todos
los hechos sangrientos acumulados en tres décadas, asilan al déspota y
uno a uno los países del continente van rompiendo relaciones
diplomáticas con la dictadura, a lo que suman un boicot económico.
Cercado como una fiera herida, el déspota es ajusticiado el 30 de Mayo
de 1961.
La desaparición física del Chacal de San Cristóbal no
detuvo la maquinaria criminal del régimen, el cual se resistía a ser
desplazado, recurriendo a nuevos y abominables crímenes, pero la suerte
ya estaba echada. No había vuelta atrás.
Pasaron 29 largos meses
desde que un avión cargado de patriotas descendiera en una aeronave en
un atardecer en Constanza, hasta la huida cobarde de Ranfis Trujillo.
Ese período de gloria y dolor fue necesario para poder desprendernos de
una de las peores dictaduras del continente americano ……y del mundo.
Ese
fue el gran aporte de los héroes. La República Dominicana no volvió
jamás a ser lo que era. Ellos nos enseñaron cual era la senda de la
libertad y su ejemplo de valor y sacrificio, preparó nuestro país para
las futuras jornadas patrióticas. Pocos años después el pueblo se
levantó y enfrentó los proyectiles que por aire, mar y tierra vomitaban
las armas en manos de militares acostumbrados a las masacres
trujillistas. La aplastante derrota de trujillismo militar en 1965,
provocó la segunda intervención norteamericana para defender aquellos
que habían sido tan leales a una de las dictaduras más feroces del
mundo.