He visto con gran pena, lamento y tristeza un video donde una joven profesional, nativa de San Francisco de Macorís, de nombre -según dice ella- la doctora Mayra Rojas. No sé si médico o abogada.
Esta joven acaba con nuestra marca provincia, Bahía de Las Aguilas, tras
visitar a Pedernales durante la Semana Mayor.
Manifestó
que se iba tan desilusionada que no vuelve jamás.
¿A buscar
qué?, dice, al indicar que en el lugar no hay nada que ver.
Ententí en parte su desilusión motivado por algo que los pedernalenses no nos
cansamos de denunciar, el deterioro de la carretera que conduce a Bahía de Las
Aguilas. Incluso el peligro que representa la prolongada bajada a la citada
Playa.
Dice que
Bahía de Las Aguilas se ve muy linda por internet, que pensó que era una playa
extensa como Playa Grande, de Río San Juan. Y define la nuestra como una
porquería y no un sueño como ella creía.
Dice que
pensó que la Playa tenía casitas de veraneo y que lo único que hay que ver es
cactus. Que lo que sintió fue miedo al ver una iguana.
La joven me
lució un tanto engreída, desorientada, arrogante, desinformada, confundida y
malcriada.
No lució con
la prudencia y formación que caracteriza a los Franco-macorisanos que conozco y
de otros que nos han visitado o de los que residen o han residido en
Pedernales.
Usted,
doctora Rojas, parece que no ha estado al tanto de que esa playa está en estado
virgen. Es decir al natural.
La belleza,
doctora, es subjetiva, pero lo que sí es objetivo es que esta playa de
tonalidades azules y arena blanca tiene 7.5 kilómetros de arena. ¿A donde, en
el país, usted ha visto otra asi?.
Es
incomparable, sin igual en la región del Caribe. Está considerada una de las
más hermosas del mundo. Déjeme decirle, doctora, que las imágenes que usted ve
por internet no reflejan ni un uno por ciento de lo que son nuestras hermosas
costas.
¿Usted no
sabía doctora, antes de hacer el viaje, que la vegetación que usted vió en ese
lugar es la xerófila. Y que es la zona del país de más baja pluviometría, lo
que le dá una ventaja para las actividades turísticas?.
Tampoco
sabía que de zona de sol y arena usted pasa a una temperatura de 18 grados en
verano y hasta cero en invierno, en las altitudes del Bahoruco, pasando por la
vía panorámica Cabo Rojo-Aceitillar con extensos pinares en la parte alta que
van más allá del Hoyo de Pelempito, una depresión, tras abrazar los mil 500
metros sobre el nivel del mar.
Es decir, doctora
Rojas, que usted desconocía que la Iguana habita en bosques secos.
Usted da
pena y verguensa, doctora. Es decir que usted tambien desconocía que en Bahía
de Las Aguilas no hay hoteles ni casita de veraneo como dice usted en sus
declaraciones a los medios.
Cierto que
la bajada en la que usted se arriesgó es un gran peligro que los pedernalenses
también hemos denunciado ante las autoridades y públicamente por largos años.
Pero si se hubiese informado usted antes hubiese disfrutado en otra hermosura
más cerca y tranquila, Playa Cabo Rojo. Una gran piscina natural. Otra de
nuestras costas que encantan a la gentes de aquí y las que nos visitan.
Que pena,
doctora Rojas.
Por las barbaridades que dijo de nuestros bellezas naturales y por sus
desconocimientos de nuestra provincia, que apunta a un ejemplo del ecoturismo
nacional, pida perdón.
Valoramos y
gracias por sus aportes por la denuncia del deterioro de las vías, en
condiciones deplorables, durante largos años, pero la danó diciendo que Bahía
de Las Aguilas es una porquería. Ahí la dañó, doctora.
Y cuando
salga a hacer turismo le recomiendo que se oriente y que planifique su viaje.
Cada región tiene sus peculiaridades y atractivos.
Los nuestros
nos llenan de orgullo, como los encantos de la imponente ciudad de San
Francisco y los de la provincia Duarte que llenan de orgullo a los hijos del
Jaya.
Los
pedernalenses somos grandes anfitriones. Quienes nos han visitado lo saben.
Demasiado hospitalarios y buenos con nuestros visitantes, pero no permitimos
que absolutamente nadie, sea quien sea, nos denigre no se sabe con que
intensión.