El escritor dominicano Marcio Veloz Maggiolo falleció este sábado, según informó el exministro de Cultura José Rafael Lantigua.
“Dolorosamente, comunicamos el
fallecimiento de nuestro querido Marcio Veloz Maggiolo. Ha muerto el escritor
dominicano vivo más importante. Descansa ya en la Paz del Señor”, expresó
Lantigua.
El afamado escritor dominicano había
sido ingresado el 26 de marzo de este año, en cuidados intensivos en el Centro
de Diagnóstico Medicina Avanzada y Telemedicina (Cedimat), tras haberse
contagiado con el covid-19, sin embargo, hasta el momento se desconocen las
causas de su fallecimiento.
Una mirada a la vida del prominente
escritor
Maggiolo nació en Santo Domingo, el 13
de agosto de 1936. Fue un poeta, novelista, arqueólogo, antropólogo, ensayista,
profesor universitario y diplomático dominicano.
Hijo de Francisco Veloz Molina y
Mercedes Maggiolo. Cursó sus estudios primarios en la escuela México y los
secundarios en el liceo Presidente Trujillo y Escuela Hostos. Se graduó en
Técnicas de Arqueología por la Universidad de Madrid en 1970 donde también recibió
el Doctorado de Historia de América con especialidad en Prehistoria. A su
regreso al país realizó investigaciones sobre el tema y publicó un libro
fundamental para el conocimiento de las raíces culturales nacionales
Arqueología prehistórica de Santo Domingo. Obtuvo los títulos de Licenciado en
Filosofía y Letras por la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y Doctor
en Historia de América de la Universidad de Madrid. Fue director de
investigaciones del Museo del Hombre Dominicano, editor y director de la
Revista Dominicana de Antropología. También, hizo estudios superiores de
periodismo en Quito, Ecuador.
Poseedor de una vasta cultura, se inició
en el quehacer literario a los 20 años con el libro de poemas El sol y las
cosas, publicado en la Colección Arquero que dirigía Antonio Fernández Spencer,
quien escribe el prólogo a esta obra titulado “Una poesía ordenada”, en el que
pide interesar a los jóvenes con las fórmulas claras extraídas de la tradición
española ya encarnadas en esta primera obra. Le siguió la novela de ambiente
bíblico El buen ladrón de 1960, la cual recibió el Premio William Faulkner a la
mejor narración dominicana de ese año, que también publicó la Colección
Arquero.
Más tarde escribió Creonte, drama de un
acto, y otro libro de poemas titulado Intus, que recibió el Premio de Poesía
Gastón F. Deligne en 1962. Escribió los relatos El prófugo publicado por
Brigadas Dominicanas y La vida no tiene nombre por la Colección Testimonio.
Perteneció al grupo literario El Puño y escribió Los ángeles de hueso, el cual
sentó las bases para una nueva modalidad de narración. Su producción
novelística ha tocado temas de su preferencia como la revolución dominicana, la
figura del dictador, las vivencias de su infancia en el barrio de Villa
Francisca. Escribió varias novelas cortas, y en una de ellas Florbella, vinculó
la literatura con su otra gran pasión la arqueología. Escribió también Cuentos,
recuentos y casicuentos. Uno de sus mejores cuentos es La fértil agonía del
amor en el que demuestra sus valores como maestro del género, al impregnar la
realidad con una visión fantástica del mundo.
Fue director del Museo del Hombre
Dominicano, del Departamento de Antropología e Historia de la UASD y embajador
en México, Perú e Italia. Fue fundador y primer director del Departamento de
Extensión Cultural de la Universidad Autónoma de Santo Domingo en el período
comprendido entre 1966 y 1968, también, profesor de este centro académico. Fue
editor y director de la Revista Dominicana de Antropología, miembro correspondiente
de la Academia Dominicana de Geografía, de la American Anthropological
Association y de la T.T. Historical Society, Trinidad Tobago.
Obtuvo numerosos premios nacionales e
internacionales, entre los que se encuentran el Nacional de Literatura, el Caonabo
de Oro y de la Academia de Ciencias de la República por el conjunto de su obra
traducida a varios idiomas. Novelista de fecunda imaginación, experimentó
distintas técnicas narrativas con notable éxito de la crítica. Como arqueólogo
realizó diversas investigaciones sobre las culturas precolombinas de República
Dominicana y de otros países antillanos. Parte de su obra narrativa y
ensayística fue traducida al inglés, italiano, francés y alemán.
Sus incursiones en la poesía, teatro,
novela, cuento breve, arqueología, periodismo, magisterio, lo convierten en una
figura, polifacética y combativa. Fue uno de los escritores dominicanos
contemporáneos más difundido nacional e internacionalmente. Por sus méritos
literarios y culturales le fue dedicada la IX Feria Internacional del Libro
Santo Domingo 2006. En 2007, la Academia Dominicana de la Lengua lo propuso
para el Premio Nobel de Literatura por considerarlo el escritor vivo más
relevante del país. En 2009 Alfaguara publicó su novela Memoria Tremens. El
ministerio de Cultura le ha otorgado el premio anual de novela 2010.
En el año 2012 Veloz Maggiolo presentó
la imprescindible obra Memorias reversibles, estudio valorativo y testimonial
de múltiples textos y autores de la literatura del siglo XX, tanto dominicanos
como de América.
La Biblioteca Nacional Pedro Henríquez
Ureña homenajeó al eminente escritor en el año 2014 en el espacio Mi vida con
los libros, en esta ocasión se le entregó una placa de reconocimiento y se le
llamó un hombre del Renacimiento, por su versatilidad como escritor, novelista,
ensayista, poeta y antropólogo.