Al evento asistieron legisladores y sus representados, gobernadores, alcaldes y exalcaldes, comerciantes, empresarios y comunicadores; mientras que por UCATEBA estuvieron Monseñor Andrés Napoleón Romero Cárdenas, obispo de la Diócesis de Barahona, su rector Marco Antonio Pérez, así como sus vicerrectores, directores de escuelas, docentes y personal administrativo, entre otros invitados.
Mejía Vallejo, inició su ponencia destacando las potencialidades turísticas y la belleza de nuestra “Perla del Sur”, haciendo un llamado a su liderazgo de los sectores público y privado a impulsar su desarrollo, uniendo propósitos en esa dirección, poniendo como referencia los logros alcanzados por las provincias de La Romana, Samaná, La Vega, La Altagracia, entre otras, en las cuales “la unión ha sido clave para que tengan la fortaleza turística y urbanística que hoy exhiben".
Enfocó una gran parte de su conversatorio hacia los presentes en el aspecto de lo fundamental de la educación, reseñando la importancia del hogar en esa fase, haciendo por demás referencia a lo que expone la UNESCO sobre: “Aprender a ser, Aprender a Hacer y Aprender a Convivir con los Demas”, destacando en esto el rol de las universidades de índole católicas en el desarrollo de las comunidades en donde pernoctan, que impactan a toda la región, haciendo mención de: UCATEBA, PUCAMAIMA, UCATECI, Universidad Católica de Santo Domingo, entre otras.
El conferencista mostró un apasionamiento por la lectura de grandes autores, exponiendo ante el público varias frases, máximas y episodios de distintos libros, relacionándolas todas con el tema principal del contenido de la charla, que impactaban a los presentes, pues cada ejemplo llegaba como “dardo al corazón” de cada uno en el salón Luís Díaz.
Sócrates, Arquímedes, Miguel Angel Buonarroti, Teresa de Calcuta, Mahatma Gandhi, Steve Jobs, Stephen Hawking y Aristóteles, fueron varios de los grandes pensadores a los que Mejía Vallejo hizo referencia en su ponencia magistral, de los cuales cada cita era un mensaje de gran reflexión para los que estábamos allí.
También contó anécdotas de viajes al extranjero, exponiendo las vicisitudes con las experiencias a Singapur, México y otras naciones, destacando de ellos su orden ciudadano, sus leyes y la unidad de sus liderazgos en torno a un mismo propósito para desarrollarlas.
Se refirió a la vanidad de los dominicanos, que desde que “obtienen un dinerito o un cargo importante”, adquieren una yipeta, lujos y se rodean de queridas”, puntualizando el consejo que le diera un amigo chino con sus hijos, a los cuales prefirió dejarles de herencia “conocimiento”, en vez de dinero, pues para esa persona “lo aprendido se multiplica y genera beneficios, pero el dinero se agota y todo termina dejando miseria”.
La charla produjo conmoción, al expositor hacer referencia a un episodio en la vida del famoso pintor Miguel Angel, en la Roma del Papa Julio II, cuando estando en un encuentro lleno de personas, dijo: “ahí está”, dejando atónito a todos, quienes creyeron que el también escultor estaba delirando. Lo que estaba señalando era un trozo de mármol que yacía en ese lugar, que serviría luego de base para la gran escultura del Moisés, de su autoría, con lo que quiso hacernos llegar el mensaje de la importancia de “crear, romper moldes, dejar la rutina que a poco conduce”.
El mensaje de Mejía Vallejo fue muy claro: para lograr el desarrollo de Barahona y la región Enriquillo se requiere de una gran alianza de sus fuerzas vivas, con el apoyo de sus universidades, para que impulsen proyectos e iniciativas que sean tomadas en cuenta por quienes nos dirigen y las pongan en el presupuesto, amén de que los empresarios y comerciantes también inviertan en ella, en un gran plan, con el apoyo de todos. Pero además nos dejó la reflexión de la importancia de la educación desde la familia hasta el nivel técnico, universitario y de postgrados, para que aporten los recursos humanos de calidad ante las exigencias que se requerirán, tocando también el tema de la fe, el amor al prójimo, la solidaridad y la unión familiar.
En la actividad, Monseñor Romero Cárdenas tuvo la invocación religiosa, mientras que Marco Pérez fue quien dio la bienvenida, palabras de motivación y leyó el perfil del conferencista. Al final hubo preguntas y exposiciones de los presentes, que se convirtieron en un riguroso debate en pro del desarrollo de la región Enriquillo.