Cabo Rojo, Pedernales. – La llegada del cuarto crucero con más de 3,000 turistas al puerto de la Ciudad
Turística de Cabo Rojo ha generado descontento entre los habitantes de Pedernales, quienes aseguran no recibir ningún beneficio económico y, en muchos casos, reportan pérdidas.
Los residentes de esta zona fronteriza esperaban que la actividad turística transformara su realidad económica, pero afirman que el resultado ha sido decepcionante. «El tiro salió por la culata», comentan.
Según los lugareños, los cruceristas no consumen en la comunidad, ya que los operadores del muelle les proveen todo lo necesario dentro del barco o en actividades exclusivas organizadas fuera del alcance local.
Además, denuncian que servicios como grupos folclóricos, danzas, transporte y otros operadores turísticos son traídos desde Puerto Plata, dejando a los talentos y trabajadores locales sin oportunidades.
Otra preocupación destacada es la falta de infraestructura básica para recibir visitantes, como drenaje cloacal, aceras, contenes, calles adecuadas y condiciones que garanticen la seguridad y comodidad de los turistas.
Este miércoles 20 arribará al puerto el cuarto crucero desde su inauguración, pero para los habitantes de Pedernales, este evento es casi irrelevante. «Es como si no estuviera ocurriendo nada», concluyen, visiblemente desilusionados.